A Letizia, como a los niños, se le notaba que hoy era su último día de curro. Estaba muy guapa, con su melena más brillante que nunca (¿se habrá retocado las mechas? ¿algún tratamiento para salvarlo de la radiación solar y el agua de mar?), con una sonrisa de oreja a oreja y con un vestido muy fresquito, minifaldero y juvenil. Hoy tenía muy buena cara y su estilismo, desde luego, ha sido toda una declaración de intenciones para dar la bienvenida a sus vacaciones.
La Reina se ha reunido en la mañana de este miércoles en pleno centro de Madrid con los directos de centros del Instituto Cervantes por el 25 aniversario de la institución.
Con el calor que hace, la Reina ha optado por reciclar uno de sus vestidos de su época de princesa. Se trata de un Hugo Boss de estampado étnico en tonos ocre que estrenó nada más y nada menos que en 2012 que aún está de plena actualidad y que parece adecuado para las temperaturas que estamos soportando. Letizia lo ha llevado con un minicinturón estrecho de color negro y ha dejado mucho protagonismo a los complementos.
Lo que más me han gustado han sido el bolso y los pendientes, de My Collect, de 20 euros, de una conocida firma de Instagram. El bolso, también de la firma alemana, es una cartera de mano en color camel, ese color que siempre pega con todo, aunque es un tono un poco serio. La cartera es bonita, pero un pelín grande y algo invernal para estas temperaturas. Vamos que os digo yo que le ha tenido que sudar la mano de lo lindo.
Las sandalias, también son viejas y a que no sabéis de qué tienda. Sí, también de Hugo Boss. Contentos tienen que estar en la firma germana con la publicidad que la Reina les hace. La verdad que se echa en falta un poco más de variedad patria en eso del vestir.
El calzado de hoy es un poco armatroste, aunque bonito. No entiendo por qué Letizia no ha llevado las uñas de los pies pintadas de rojo como en otras ocasiones en las que ha llevado este calzado.
Otro estreno de esta jornada han sido sus pendientes dorados en forma de hoja. Muy bonitos, me encantan y ya forman parte de su nueva colección de pendientes que está atesorando este verano.
Como veis, Letizia mantiene la misma talla que hace cuatro años y cuando no sabe que ponerse tira de fondo de armario que en su caso debe ser un fondo muy pero que muy profundo. Quizá todos los modelitos de tendencia ya los tiene en la maleta para sus días en Mallorca o para el destino exótico y privadísimo al que se escape con su familia a finales de mes.