Lluís Homar ha publicado sus memorias ‘Ahora empieza todo’ en las que relata sus sus inicios en el Teatre Lliure hasta la actualidad. En medio, tiene un capítulo dedicado a Pedro Almodóvar con el título: ‘Del cielo al infierno’. En ‘La mala educación’, Homar cuenta que se sintió muy valorado, pero en ‘Los abrazos rotos’ la presión le llevó a recurrir a doparse y tomar ansiolíticos.
El actor catalán y Pedro Almodóvar llegaron a forjar una buena amistad tras el rodaje de ‘La mala educación’, película que le llevó a ganarse el premio Goya a Mejor Actor Secundario. En esta parte que describe como “cielo” escribe: “Con Almodóvar aprendí muchas cosas. Del cine y de lo que lo rodea, con él entras en otra dimensión. Él estaba fascinado conmigo y yo con él. [La promoción de 'La mala educación'] fue apoteósica, viví en la gloria durante unos días. Si me hubieran llegado a decir cómo acabaría todo, no me lo creería”.
Sin embargo todo cambió cuando el director le eligió como el protagonista de ‘Los abrazos rotos’. “Cuando ensayábamos ya había algo que no iba bien. 'Me suena teatral', me decía cuando pasaba texto. Yo me sentía cohibido, paralizado, sin saber por dónde tirar. Todo era no. 'Vamos a trabajar los tonos', decía, y yo sentía una inseguridad abismal. Y cualquier propuesta mía recibía, generalmente, una respuesta: 'no' “, relata en su libro.
La desesperación del actor fue tal que llegó a trasladarle su frustración al director ”llorando, abrazado a él, perdido y esperando una guía para el desarrollo del personaje”, escribe, pero las exigencias del manchego no cesaron y la situación fue a peor.
El actor se arrepiente de haber aguantado muchas cosas: “Sólo sufrí”, confiesa, y señala que la situación fue a tal extremo que tuvo recurrir a tomar ansiolíticos en los últimos rodajes y tomar válium, “un dopaje para quitar de encima la ansiedad y poder rodar con él”.
Homar recuerda el día que se enfrentó a Pedro: “No sé cómo, me medio enfrenté a él. Almodóvar me estaba dando indicaciones y acabó diciéndome: 'Es que no me entiendes'. Y a mi solo me salió responderle: 'Es que a lo mejor no te explicas bien'”.
Incluso, en la presentación de la película ‘Los abrazos rotos’, revela que el director llegó a ignorarle. “Ya no quiero pensar que me ignoró delante de todo el mundo y que ni tan siquiera me citó cuando empezó a dar la palabra a los actores para que intervinieran”.
El catalán prefiere pasar página con el director: “Tampoco quiero pensar que lo que tendría que haber hecho es levantarme y marcharme. (...) Ahora lo que quiero es dejar espacio a la pena, porque todo fue como fue y no de otra manera, y mi relación con Almodóvar es la que es”.
Otros actores que han criticado a Pedro Almodóvar
Aunque ahora Carmen Maura y Pedro Almodóvar parece que han acortado distancias, son muy conocidas las declaraciones de la actriz en las que llegó a decir que no quería volver a trabajar con él porque “sus rodajes son tensos” y no le apetecía.
La actriz Emma Suárez tuvo unas palabras hacia el director en su discurso al ganar el Goya a la mejor actriz por ‘Julieta’, en las que aludía a lo difícil que es trabajar con él aunque trató de justificarlo con un “eso hace que una lo pase fatal y quiera mejorar”. Sin embargo, anteriormente ya había manifestado que trabajar con Pedro “te pone en una situación de presión constante”.
Victoria Abril también criticó al manchego cuando declaró: “Hace 20 años que ya no me quiere. A Pedro le gustan las chicas de 30. A los 40 ya no las quiere ni ver”. El actor Gael García Bernal confesó que durante el rodaje de 'La mala educación' llegó a pensar en tirar la toalla. “Para lograr este resultado pasé por un proceso doloroso” y explicó: “Trabajar con Almodóvar fue algo muy complejo, en toda la extensión de la palabra”. También el compositor Bernardo Bonezzi desveló “lo difícil” que era trabajar con él, una palabra que ya han utilizado varios actores: "difícil".
Otra de las polémicas más sonadas del director, vino de la mano de Jorge Sanz. El actor pasó de ser su preferido y elegirlo como el protagonista de 'Carne trémula', pero justo al iniciar el rodaje, le sustituyó por Liberto Rabal. Pedro alegó que no le gustaba la dicción del Jorge pero las malas lenguas dicen que otro motivo, personal, fue el factor determinante.