Ernesto Neyra, exmarido de Carmina Ordóñez, fue detenido este lunes por la Policía Nacional y ese mismo día se procedió a su encarcelación en una prisión de Matalascañas (Huelva). Sobre él pesaba una orden de busca y captura para que cumpliera una pena de tres meses de cárcel por el impago de la pensión de alimentos de los tres hijos que tiene en común con Adelaida 'Lely' Céspedes.
Según lo dictaminado por el Juzgado de lo Penal número 3 de Málaga, el bailaor tenía la obligación de ingresar en prisión de manera voluntaria el pasado 13 de febrero. Llegó a acumular una deuda de más de 50.000 euros, que se rebajó a 9.000 gracias a la buena predisposición de Céspedes. Incluso, desde los Juzgados ofrecían la posibilidad de fraccionar el pago en nueve mensualidades.
El fallo final de juez que recoge la sentencia apunta que, a pesar de que Neyra podría haber evitado la condena de libertad, "finalmente deberá ingresar en la cárcel al no haber satisfecho ni la cantidad adeudada en concepto de pensión alimenticia ni la multa derivada por la responsabilidad civil de sus actos".
Neyra estaba "absolutamente tranquilo"
Según ha informado el diario 'ABC', Neyra estaba "absolutamente tranquilo" en el momento que ingresó en prisión, y "no mostró ningún tipo de nerviosismo". No es raro que tuviera ese comportamiento, pues "se lo podía imaginar".
Ernesto se encuentra en el módulo 10 de la cárcel de Huelva, en el que los presos está en cuarentena, para que aquellos que ingresan en la cárcel queden aislados y no propaguen el coronavirus al resto de internos.
