La Corte Suprema de La Haya ha condenado este martes al luchador marroquí de ‘kickboxing’ Badr Hari a dos años de prisión por varios actos violentos y altercados nocturnos que se produjeron en Amsterdam en el año 2012, aunque sólo pasará seis meses en prisión.
El tribunal ha condenado al luchador por un “asalto con agravante” al empresario holandés Koen Everink durante una fiesta nocturna en Ámsterdam Arena en 2012, así como por otro incidente en el club de Jimmy Woo de la misma ciudad, donde el luchador rompió un vaso frente a su víctima e intentó asaltarla con el cristal roto, según informa Efe.
Los magistrados consideraron un “agravante” que Hari abusara “de su superioridad física”. No es la primera vez que es llamado por la justicia. En octubre de 2015, ya fue condenado a 24 meses de cárcel por cinco diferentes reyertas en varios clubs de Ámsterdam: dos asaltos graves, dos intentos de asalto con agravante, y dos ataques. Hari "utilizó su superioridad física" para atacar a sus víctimas, según la Justicia.