Inmersos en un viaje de estado a Alemania, los Reyes acudieron la pasada noche del 17 de octubre a la cena de gala ofrecida por el presidente alemán y su mujer en el palacio de Bellevue de Berlín. Un evento en el que, tal y como ha confirmado la prensa local, la gran protagonista fue la reina Letizia.
Como si de una alfombra roja hollywoodiense se tratase, los reyes Felipe y Letizia deslumbraron durante la cena ofrecida por el presidente Frank-Walter Büdenbender y la primera dama, Elke Büdenbender. Y mientras el monarca iba enfundado en un impecable esmoquin negro, la Reina deslumbraba con uno de los vestidos más favorecedores y admirados de su armario.
La reina Letizia deslumbra en Alemania con un vestido rojo con capa
“Lady in Red”. Así ha bautizado la revista alemana 'Bunte' a la reina Letizia tras su aparición en la cena de gala ofrecida hace unas horas en Berlín. Una gran ocasión para la que la Reina recuperó uno de sus estilismos más aplaudidos. El protagonizado por un vestido rojo de Stella McCartney con el que ya conquistó a la sociedad europea en mayo de 2017 durante la celebración del 50 cumpleaños del rey Guillermo Alejandro de Holanda.
Con escote redondo, silueta lápiz y una elegante capa lateral, este diseño, el modelo Cecilia de la diseñadora, tuvo por entonces un precio de venta cercano a los 2.600 euros.
Para completar su look, la reina Letizia volvió a subirse a unos altísimos zapatos, concretamente de 12 centímetros. En color dorado, con plataforma y pulsera al tobillo, la Reina eligió unas bonitas sandalias de Jimmy Choo, el modelo Rosie 120, que tienen un precio de 750 euros, que lució a juego con una cartera de mano de Magrit.
Un estilismo impecable que la reina Letizia remató con unas espectaculares joyas que se convirtieron en el centro de todas las miradas.
Los misteriosos pendientes de diamantes y rubíes de la reina Letizia
A pesar de no haber lucido tiara, tal y como se esperaba, la reina Letizia ha cedido todo el protagonismo de sus joyas a los pendientes, que han causado sensación. Un efecto que la monarca ha conseguido en las contadas ocasiones que los ha lucido y que ha recordado el misterio en torno a ellos.
Fue en febrero de 2017 cuando doña Letizia estrenó unos increíbles pendientes que rápidamente acapararon todas las miradas. Con 216 diamantes en cascada y 12 rubíes, esta joya generó una gran expectación. Hasta tal punto que la Casa Real aseguró que estaban “en el joyero de la Reina desde hace tiempo y son de sus propiedad”.
Desde entonces, muchas han sido las teorías sobre el origen de estos pendientes. Unos pendientes que aseguran tienen un gran valor, y que la prensa especializada confirmó que no se trataban de una de las pieza de las llamadas ‘joyas de pasar’ que doña Letizia heredó de la reina Sofía.
Además, tampoco consta en la lista de regalos oficiales que desde 2015 el rey Felipe VI da a conocer periódicamente como parte de los principios de transparencia de la Corona. Por lo que también se descartó la posibilidad de que fuera un regalo del matrimonio.
Entre las teorías que más fuerza cobran se encuentra la que apunta que estos pendientes podrían ser un obsequio de un jeque de Arabia Saudí, destino que el rey Felipe visitó unos meses antes de que la reina Letizia luciera esta espectacular joya.
La reina Letizia se baja de sus tacones por el neuroma de Morton
Apenas unos días después de desvelar que sufre neuroma de Morton en el pie izquierdo, la reina Letizia tomaba un avión rumbo a Alemania en su decimotercera visita de Estado. A su llegada al Pabellón de Estado del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, la monarca mostraba un inusual estilismo que defendía a las mil maravillas.
Doña Letizia lució un favorecedor traje azul marino con raya diplomática, firmado por Hugo Boss, y formado por una blazer entallada y un pantalón recto que combinaba con un sencillo jersey de punto blanco. Pero sin duda, todas las miradas estaban puestas en sus pies. Tal y como le han recomendado los médicos, la reina Letizia se ha bajado de los tacones optando por uno elegantes mocasines azules con cordones de la firma Uterqüe.
