Tamara Falcó se pronunció por fin este jueves en 'El hormiguero' después de la polémica que ha protagonizado tras anunciar la firma Sophie et Voilà mediante un comunicado que ya no iban a seguir confeccionando su vestido de novia para su boda con Íñigo Onieva el próximo 8 de julio por "las exigencias" de la hija de Isabel Preysler, que iban en contra de su código ético. La firma bilbaína no solo le iba a hacer dos vestidos gratis si no que además, le había pagado 150.000 euros por llevar su vestido y que fuera su imagen de marca, según desvelaron a 'Sálvame' testigos que estuvieron presentes en las reuniones entre las diseñadoras y la marquesa de Griñón.
Estas mismas fuentes aseguraron que Tamara Falcó es una persona "déspota e histriónica" y que trató muy mal a las diseñadoras de Sophie et Voilà, Sofía Arribas y Saioa Goiti. Además aseguraron que tienen pruebas de ello ya que todos estos "encuentros se graban para luego poder hacer un vídeo de recuerdo en el que se detalla el proceso" y la imagen de Tamara "es dantesca", señalaron.
Tamara Falcó se pronuncia tras la polémica con la firma de su vestido de novia Sophie et Voilà
Este jueves, Tamara Falcó rompió su silencio sobre el polémico tema de su vestido de novia y explicó qué había pasado en 'El Hormiguero': "Empezamos con estas diseñadoras y yo ya tenía en mente un vestido que había visto hace un montón. Buscando para la boda de mi hermana [Ana Boyer], se lo enseñé y no le gustó y pensé: 'pues a mí me encanta'. Entonces, ese vestido siempre se me quedó detrás pero de repente, voy y me caso y digo: 'con qué vestido me gustaría casar, pues con este' y entonces yo tenía esa inspiración", señaló refiriéndose a un vestido de Karl Lagerfeld para Chanel.
La marquesa de Griñón continuó contando: "Estas chicas vinieron a casa de mi madre y nos dijeron: 'oye, nos encanta la inspiración, te lo hacemos'. En la primera prueba noes encantó. Fui con Juan Avellaneda y Blanca Unzueta y nos encantó. Llegué a 'El Hormiguero', me preguntasteis y dije: 'fenomenal, es mejor que la inspiración, va a salir todo muy bien'".
Tras decir la palabra "inspiración", le cambiaron el vestido
Cuando pronunció esta palabra es cuando se desató el pánico entre las diseñadoras y según su versión, fue lo que provocó que todo cambiara. "De repente dije la palabra 'inspiración' y empezó a haber como mucha tensión. 'No tenías que haber dicho inspiración'. Pero realmente es así como se trabaja en diseño. Empezó a haber esto y cuando llegué a la segunda prueba del vestido, había cambiado completamente".
En esta segunda prueba del vestido, Tamara fue con su madre Isabel Preysler, su hermana Ana Boyer y su cuñada. Y eso fue lo que se encontró para su sorpresa. "El vestido había cambiado y encima, con la mala pata también de que venía mi madre y ella es muy exigente. El caso es que yo no me veía porque no era mi vestido. De repente tenía unos volúmenes que no eran. Mi madre, o sea, es que hay unas fotos que lo describe todo. Fue todo súper incómodo y ahí ya todo empezó a ir mal".
Pablo Motos preguntó: "¿Tu madre te dijo claramente que no le gustaba?". Falcó señaló: "Mi madre no entendía nada. Después fue súper duro porque estaban también mi hermana, mi cuñada... que me prestaba la tiara y de repente, bajo con mi vestido y silencio. Mi hermana fue la único que me dijo: 'Vas a ser la novia más guapa' y de repente, silencio. Y yo: 'oh, oh...'. Fue horrible, horrible".
Tamara Falcó explica el contrato que tenía con la firma Sophie et Voilà
Tamara Falcó explicó el contrato comercial que tenía con la firma bilbaína Sophie et Voilà, que consistía, como se filtró en 'Sálvame', en que las diseñadoras le hacían dos vestidos gratis y le pagaban 150.000 euros por ser imagen de la marca. "Yo cuando me lo probé dije: 'es distinto'" y esto básicamente se reduce a una cosa. Yo tenía un contrato a largo plazo con Sophie et Voilà, iba a ser imagen de ellos durante un año prolongable a dos años y entre ellos, me iban a hacer mi vestido de novia. Yo no cobraba por mi vestido de novia, si no por el contrato de imagen en global. Tengo muy buenos abogados y lo que sí pusieron es que si no me gustaba el vestido, yo no me tenía que casar con ese vestido".
La marquesa explicó que entonces comenzaron los problemas con las diseñadoras: "Ya se empezó a torcer la cosa, que es súper desagradable, porque lo último que quieres es estar peleándote con los diseñadores por un vestido porque es un momento súper bonito y todo eso. Fue todo muy desagradable y ya empezaron los abogados. Yo dije: 'Para qué voy a estar con todo esto, un momento que es súper bonito para una novia'. Es que además, yo también diseño y me encanta la moda. Entonces para mí, parte de la boda, era mi vestido".
La hija de Isabel Preysler, tras las críticas: "No soy una persona difícil"
Tamara confesó lo triste y mal que le ha hecho sentirse todo esta polémica: "Al final se torció la cosa. Me desanimé, fue todo súper crudo y tengo un montón de testigos que lo vivieron. El caso es que al final, cuando ya estaba muy, muy triste con todo esto. Me dijo mi abogado: 'aquí esto se basa en una cosa, a ti te gusta el vestido sí o no' y dije: 'pues no me gusta', y me dijo: 'pues ya está'".
Entonces fue cuando se mantuvo "una conversación entre abogados y lo siguiente que es lo del comunicado de prensa" de la firma que le iba a hacer el vestido, lo que aumentó aún más la tensión entre las dos partes. "La verdad que podíamos haber terminado muy bien".
Después se pronunció sobre lo que se ha dicho sobre su carácter: "Se han dicho todo tipo de cosas, sobre lo difícil que soy... Mira, nosotros hemos tenido nuestros rifirrafes pero realmente yo no me considero una persona difícil para trabajar. Con Sisley llevo seis años, con Tous llevo 3 [siendo imagen]. Me gusta trabajar en equipo, me gusta dar mi opinión, pero lo que no me iba es a casar con un vestido de novia que no me gustaba".