El líder del grupo Taburete e hijo de Luis Bárcenas, ex tesorero del PP, ha roto su silencio cuatro meses después de que la Audiencia Nacional condenara a su padre a 33 años de cárcel y a su madre, Rosalía Iglesias, a 15 años, aunque ella finalmente quedó en libertad provisional tras depositar los 200.000 euros de fianza.
Ahora Willy Bárcenas ha salido en defensa de sus padres: “¡33 y 15 años me parece de chiste, de coña! Una cosa es lo que es justo y otra lo que se ha querido hacer con mis padres, lo que se ha hecho”, ha señalado en la revista ‘Vanity Fair’.
Según el hijo de Bárcenas, la sentencia de sus padres “buscaba un cambio de gobierno”. “Todos los políticos piensa que el resto somos tontos, solo quieren rascar votos”, ha declarado tajante.
Willy Bárcenas: “Mi padre no es el satanás que han pintado”
Después ha continuado defendiendo a su padre: “No es ningún santo, de acuerdo, pero no es el satanás que han pintado” y ha añadido: “Mis padres para mí lo son todo y lo van a seguir siendo”.
A pesar de que el músico está viviendo una estupenda etapa profesional, acaba de publicar su tercer disco ‘Madame Ayahuasca’, no puede disfrutar de su éxito por la delicada situación familiar. Al ser preguntado sobre si le afecta la situación de su padre, responde: “Claro que te afecta. Yo, en otras circunstancias, sería la persona más feliz del planeta. […] Hay gente que dice que hemos triunfado porque soy el ‘hijo de’. Es que te tienes que descojonar: hemos triunfado a pesar de eso. No nos ha ayudado. ¿Nos ha dado publicidad? Sí, pero no buena”.
“A estas alturas, ya estoy hecho a los insultos”
Willy ha hablado de sus detractores: “Hay mucha gente a la que nuestro éxito le jode la vida […] Hay muchas personas que rajan de nosotros, pero luego nos escuchan”. Sin embargo, él ya se ha hecho inmune a las críticas e insultos. “Tengo la autoestima alta y a estas alturas, ya estoy hecho a los insultos. Yo he dado la cara”.
Incluso habla del acoso que se ha ejercido sobre el grupo Taburete: “Ahora que se habla tanto de ‘bullying’ y de acoso deberíamos pensar un poco en el trato que nos han dado” y ha añadido: “Habría muchas sorpresas si al resto del mundo de la música o del arte se les examinase con el mismo rasero que a nosotros”.