El Gobierno ha empeorado su previsión de caída del Producto Interior Bruto (PIB) para este año hasta el -11,2%, debido al peor comportamiento del esperado que ha sufrido la economía española, y ha incrementado su previsión de déficit público hasta el 11,3% del PIB en 2020. Sin embargo, ha mejorado su estimación sobre la tasa de paro, que ahora sitúa en el 17,1% para cierre de 2020.
Así lo ha anunciado la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, en rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros en el que el Ejecutivo ha aprobado esta actualización del cuadro macroeconómico, el nuevo techo de gasto para elaborar los Presupuestos Generales del Estado de 2021 y el objetivo de déficit orientativo que se utilizará para elaborar las cuentas -dado que las reglas fiscales están suspendidas-.
Estas cifras divulgadas este martes actualizan las que el Gobierno envió a Bruselas el pasado 30 de abril, en las que pronosticaba una caída del PIB del 9,2% para 2020 y un repunte del crecimiento del 6,8% para 2021. Ahora se muestran más pesimistas para este ejercicio, pero creen que la recuperación del próximo año será mayor (subida del 7,2%) debido en parte a las ayudas procedentes de la Unión Europea.
Para 2021, el Gobierno espera un déficit del 7,7%, según ha anunciado la ministra de Hacienda, María Jesús Montero.
Respecto al mercado laboral, cree que la tasa de paro terminará el año en el 17,1% y empezará a bajar ya el próximo ejercicio, hasta el 16,9%; previsiones mucho más optimistas que las presentadas en abril, cuando preveían un incremento del desempleo hasta el 19% este año y una bajada hasta el 17,2% en 2021.
Mayor caída del consumo de la esperada
El empeoramiento de las previsiones para este año se produce por el desplome del consumo privado (mayor de lo esperado), que caerá un 12,6% en vez del 8,8% previsto. En 2021, sin embargo, subirá un 8,3% en vez del 4,7% que se estimaba en abril.
El gasto público subirá este año un 6,3% respecto a 2019 -mucho más de lo previsto en abril, del 2,5%-.
La inversión (medida con la formación bruta de capital fijo) se hundirá un 18,3% -siete puntos menos de lo pronosticado cuando estalló la pandemia-.
El comportamiento de las exportaciones será mejor de lo previsto, pero aun así caerán un 22,7% en comparación con 2019; mientras que las importaciones bajarán un 20% y no un 31% como se preveía en abril.
