Dos recientes accidentes han puesto en duda la seguridad del 737 8 MAX de Boeing, el avión más vendido del mundo y la principal fuente de ingresos del fabricante estadounidense. Un avión utilizado por las aerolíneas para realizar sus trayectos de corto o medio radio. Su alternativas en Airbus es el A320, un avión que es uno de los causantes de que la compañía europea emplee a 3.400 trabajadores en España.
La fábrica de Getafe (Madrid) es el encargado de montar el pasillo de esta aeronave y en el centro de Puerto Real (Cádiz) se encargan de los estabilizadores traseros. "El montaje final del A320 se realiza en Francia, aunque es uno de los modelos que más empleo genera en las fábricas española porque es la 'vaca lechera' de la compañía', explica a Vozpópuli un representante sindical de la compañía.
La plantilla española tiene muchas esperanzas en el A320. Un modelo que cuenta con una cartera de pedidos para 10 años y que puede aumentar su demanda si las investigaciones sobre el Boeing 737 8 MAX revelan fallos de seguridad. "El pedido de aviones se realiza con una gran antelación, porque no se hace de uno en uno y necesita una gran inversión. Pero, lo cierto es que el A320 es la única alternativa en el mercado a ese modelo de Boeing", explican.
Sin duda, la posibilidad de aumentar los pedidos de este modelo pueden compensar el reciente fracaso del Airbus A380. La compañía anunció en sus último resultados anuales el fin de su 'macroavión', una decisión que afectará a entre 3.000 y 3.500 trabajadores (entre 400 y 500 en España), lo que supone menos del 3% de la plantilla del fabricante europeo.
Aunque, los representantes de los trabajadores matizan que "en estos momentos, no se podría aumentar de forma exponencial la producción del A320 porque la infraestructura actual tiene cubierta su ocupación". Airbus dedica también espacio en sus centros a otros productos 'estrella' como el A350 y el A330.
4.000 millones en Bolsa
Los inversores sí ven opciones de que Airbus pueda aumentar sus pedidos con las dudas que se vierten con el 737 8 MAX. Tras el accidente del pasado domingo del avión de Ethiopian Airlines fabricado por Boeing, las acciones del fabricante europeo han repuntado un 4,5% en Bolsa, lo que supone un aumento de su capitalización de 4.000 millones de euros.
Mientras, las acciones de Boeing caen un 10% esta semana ante estas dudas sobre su modelo estrella. La Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA) ordenó este martes la suspensión de todos los vuelos del modelo 737 MAX 8 como "medida preventiva", una decisión que también ha anunciado China, Omán, Etiopía, Australia, Singapur, Indonesia, Mongolia, Nueva Zelanda, India, Uzbekistán, Guinea Ecuatorial, Tailandia, Egipto, Líbano, Emiratos Árabes Unidos o Turquía.
El último en unirse a esta prohibición ha sido el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que ha anunciado este miércoles que su Gobierno emitirá una "orden de emergencia" para suspender las operaciones de los modelos Boeing 737 MAX 8 y 737 MAX 9 tras el siniestro de Etiopía. Estas decisiones se adoptan mientras los expertos analizan las cajas negras del aparato y dictaminan si el causante ha sido el avión de Boeing.
