La actividad de la zona euro ha intensificado su desaceleración en agosto debido a la caída de la producción del sector manufacturero y al descenso de la actividad empresarial en el sector servicios, mientras que las presiones inflacionistas "cobraron ímpetu en agosto", según S&P Global.
El avance del índice PMI de actividad en la zona euro de Hamburg Commercial Bank (HCOB), elaborado por S&P Global y publicado este miércoles, se ha reducido de los 48,6 puntos registrados en julio a los 47 en agosto, su nivel más bajo desde noviembre de 2020 y desde abril de 2013 "si se excluyen los meses de la pandemia".
Según la consultora, ambos sectores indicaron una caída de los nuevos pedidos y la contratación de empleo "casi se paralizó", ya que las firmas "se mostraron más reacias a aumentar su capacidad" ante un posible "deterioro de la demanda y unas perspectivas más pesimistas para los próximos doce meses".
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