Los agricultores y ganaderos españoles se toman muy enserio las elecciones al Parlamento Europeo del próximo 26 de mayo. La Comisión Europea prepara un 'tijeretazo' a la Política Agraria Común (PAC). Y, “sin la PAC no hay negocio”, defienden los representantes del sector consultados por este medio.
La importancia de la PAC para España se valora al conocer que, en 2017, un total de 775.000 trabajadores del campo recibieron 6.678 millones de euros por esta vía. "En el período 2021-2027 nos estamos jugando más de 44.000 millones de euros", explican desde el Ministerio de Industria.
Bruselas plantea en sus nuevos presupuestos, que abarcan desde 2021 a 2027, reducir en un 3,5% las conocidas como ayudas del primer pilar (pagos directos y medidas de mercado) y en un 14,5% las del segundo pilar (planes de desarrollo rural). "España considera necesario restablecer los niveles que nos permitan responder a los retos de este momento", reivindican desde Agricultura.
En el período 2021-2027 nos estamos jugando más de 44.000 millones de euros"
"Estas cifras no tienen en cuenta el efecto de la inflación, por lo que podríamos hablar de una reducción final real de entre un 14 y un 20%", explican desde Cooperativas Agro-alimentarias de España. Esta reducción se produce por la necesidad de financiación de las nuevas prioridades (inmigración, defensa, seguridad) y la necesidad de hacer frente al impacto del brexit son razones esgrimidas por la Comisión Europea para justificar su propuesta de presupuesto.
"Creemos que el aumento de prioridades no debería hacerse a costa de reducir partidas como la PAC, la política común por excelencia que ha demostrado en más de 50 años de vida su valor europeo, su éxito y su capacidad de adaptación a los nuevos retos económicos, medioambientales y sociales", añaden los representantes de Cooperativas Agro-alimentarias de España.
Un 37,6% del presupuesto
La PAC representaba, en 2018, el 37,6% del presupuesto de la Unión Europea, unos 58.100 millones de euros. De esta cifra, el 71% corresponde a ayudas directas asignadas a los agricultores. Francia es el primer país beneficiario de la PAC (17,5%), seguido de España (11,4%), Alemania (10,8%) e Italia (9,4%).
Un hecho por el que la Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos reclama a las formaciones políticas que "defiendan una PAC con unas ayudas enfocadas a los agricultores y ganaderos profesionales, que estabilice los mercados en niveles de precios dignos y que proteja el modelo agrario y rural europeo frente a la competencia exterior desleal".
Pero la tendencia en los últimos ha sido recortar esta partida. El porcentaje que los gastos agrícolas representan en el presupuesto de la Unión Europea disminuye constantemente desde hace varios años. Si la PAC representaba un 66% del presupuesto de la Unión a principios de los años ochenta, tan solo asciende a un 37,6% para el periodo de 2014-2020.