Merrill Lynch Bank of America advierte del riesgo de que España revierta los avances logrados en política económica. Con un Parlamento fragmentado tras las elecciones generales, “será más fácil acordar políticas heterodoxas que aquellas que necesita el país”, asegura la entidad estadounidense en el primer informe de mercado emitido tras los comicios autonómicos y municipales del 24-M.
Es más, en otra nota fechada tan sólo tres días antes de la cita con las urnas, los analistas del banco de inversión afirmaban: “Cada vez está más claro que será difícil formar un Gobierno fuerte con la capacidad de cumplir con los ajustes fiscales y las reformas estructurales todavía pendientes después de las elecciones de noviembre”.
"El ajuste fiscal y las reformas laboral, tributaria y de las pensiones pueden peligrar", según Merrill Lynch
En el informe elaborado inmediatamente después de los comicios al que ha tenido acceso Vozpópuli, la entidad explica que la dispersión del voto ha sido un fenómeno más agudo de lo pronosticado: “Argumentamos en la nota previa a las elecciones regionales que probablemente habría unos resultados muy fragmentados en todas las regiones y ciudades, con el PP y PSOE perdiendo apoyos en favor de los dos nuevos partidos, Podemos y Ciudadanos. Y se ha dado incluso más fragmentación de lo esperado”.
Los autores del informe sostienen que la agrupación de PSOE y Podemos batirá en la mayor parte de regiones a la formada por el PP y Ciudadanos. Lo cual, a juicio del banco, se traduce en que después de 2015 peligrará el ajuste fiscal y las reformas en materia tributaria, laboral y de las pensiones.
Si bien cree que los mercados de deuda están aislados de cualquier turbulencia por la expansión monetaria del BCE, la firma de inversión observa riesgos en la bolsa y el mercado inmobiliario español. No obstante, “con el mercado cada vez más preocupado por Grecia, los resultados electorales podrían importar más de lo que pensamos que deberían en el corto plazo”, comentan los analistas de Merrill en los dos informes titulados ‘Elecciones regionales en España: es complicado (1 y 2)’.
La entidad también destaca que Podemos se mostró especialmente fuerte en Barcelona y Madrid. En cambio, considera que Ciudadanos se desinfla y ha acabado con unos resultados “ligeramente peores” de lo vaticinado.
"España todavía necesita un ajuste estructural de unos 2,5 puntos para alcanzar el equilibrio", asevera la entidad
Respecto a la formación de gobiernos regionales y municipales, BofA Merrill Lynch subraya que Podemos y Ciudadanos no van a entrar en una coalición con facilidad, ya que podrían perder apoyos en las urnas si respaldan a aquellos que son parte del establishment. Es decir, que hay por delante varias semanas de negociaciones, gobiernos minoritarios y repeticiones de elecciones. "Los resultados de las elecciones y las potenciales coaliciones nos ayudarán a examinar las posibilidades de coalición a nivel nacional y si éstas serán amistosas con los mercados. Lo que ocurra en estos meses puede tener una gran influencia sobre los resultados de las generales", concluye la nota.
En sus reiterados informes sobre la economía española, el banco de inversión siempre resalta que en los últimos años se han dado unos progresos impresionantes. Aunque la entidad señala las buenas previsiones de PIB sólo superadas por Irlanda, también incide en que el patrón de crecimiento ha vuelto a basarse en el consumo, con los riesgos que ello implica a medio plazo. "Esperamos que la incertidumbre política pese sobre el sentimiento inversor en 2016 debido a un parlamento muy fragmentado, lo que podría crear un ambiente difícil y volátil para la adopción de reformas", asevera Merrill Lynch en su nota titulada 'España: una historia con dos partes'.
La economía española no ha reducido lo bastante el stock de deuda con el exterior, lo que la deja en una situación muy delicada
En opinión de los economistas de la entidad, la economía española todavía ha de hacer frente a los problemas de baja productividad, mala demografía y por lo tanto, escaso crecimiento potencial, las grandes rigideces de algunos mercados, el déficit público, los malos resultados en educación, la dualidad del mercado laboral, la recolocación de una larga lista de desempleados, la mala calidad del empleo, el tamaño de unas empresas demasiado pequeñas para exportar, la poca sustitución de importaciones por productos españoles y el desendeudamiento pendiente de hogares y pymes.
Para Bank of America Merrill Lynch, España ha conseguido reducir significativamente sus desequilibrios. Pero no lo bastante como para rebajar el stock existente de deuda con el exterior, lo que deja a la economía española en una situación muy delicada en el caso de shocks, sobre todo políticos.
"España todavía necesita un ajuste estructural de unos 2,5 puntos para alcanzar el equilibrio estructural en los próximos años. La pregunta es si el escenario político permitirá semejante ajuste más adelante. Lo cual se agrava por el hecho de que una parte sustancial de la reforma de las pensiones precisa ser desarrollada e implementada en 2019", indican los expertos de la firma estadounidense.