El equipo de economistas de BBVA Research ha revisado a la baja su previsión de crecimiento para la economía española hasta el 1,9% para este año (desde el 2,3% que preveía hace tres meses) y para el 1,6% en 2020, una rebaja que presiona al Gobierno en la víspera de que envíe su actualización del cuadro macroeconómico a Bruselas junto con sus Presupuestos de 2020 -nuevamente prorrogados-.
La revisión a la baja se ha producido por la ralentización de la demanda interna, que se debe a que las familias cada vez consumen menos y compran menos bienes duraderos (las decisiones de compra de este tipo de bienes que se pospusieron durante la crisis ya se han retomado y ejecutado), y por un avance menos vigoroso de lo previsto de la inversión.
"El consumo privado prácticamente se estancó en el segundo trimestre del 2019. La inversión también nos da un avance menos dinámico, sin embargo la contribución de las exportaciones netas ha sido positiva y explica por qué la economía ha terminado creciendo más de lo que auguraba la demanda interna", ha explicado Rafael Domenech, responsable de Análisis Económico de BBVA Research.
Influyen también en este descenso la revisión a la baja realizada por el INE de los datos de crecimiento de PIB de los últimos tres años, así como la incertidumbre y los riesgos procedentes del exterior, como la guerra comercial y las amenazas proteccionistas de EEUU o la posibilidad de que se produzca una salida del Reino Unido sin acuerdo.
Menor empleo para los que cobran el SMI
Para el mercado laboral, BBVA Research espera que en el periodo 2019-2020 se creen 750.000 puestos de trabajo, lo que supone un descenso del 30% respecto al bienio anterior, y augura que la tasa de paro se sitúe en torno al 13,3% en promedio el próximo año.
El equipo de expertos de la entidad, liderado por Jorge Sicilia, considera que la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) ha tenido un impacto "limitado" en el empleo, aunque sí observa un comportamiento "ligeramente menos favorable" de la afiliación a la Seguridad Social entre los colectivos más expuestos al SMI: jóvenes, ocupados en actividades del sector servicios con bajas retribuciones (comercio u hostelería), o los residentes en Andalucía, Canarias, Extremadura y Región de Murcia.
"En los colectivos con mayor cobertura del SMI, el número de cotizantes aumentó el 1,6% entre enero y septiembre con respecto a los nueves últimos meses de 2018, siete décimas menos que en el promedio 2017-2018. En los restantes grupos, la ralentización del crecimiento de la afiliación fue menor (en torno a tres décimas)", señalan.