“Este lunes nos espera el caos. Colas interminables, quejas de aquellos a los que, desde el pasado jueves (30 de abril), tengan sus cuentas bloqueadas por no haber presentado la documentación necesaria”. El comentario es compartido por los principales sindicatos del sector financiero. Las cifras son difusas, en función de la fuente, de cuántas personas habrán pasado el puente de mayo sin poder operar con sus respectivas entidades. El cálculo efectuado por el propio sector eleva entre 5 a 8 millones el número de cuentas bloqueadas. En España hay aproximadamente 80 millones de cuentas bancarias, de las cuales 50 pertenecen a particulares. Los cálculos del portal Rankia estiman que un 15% de estas cuentas tienen la documentación sin actualizar. Un exacerbado volumen que podría haber sido mayor si la banca no hubiera forzado a cientos de miles de sus clientes a presentar el DNI, y otra serie de documentación en el caso de autónomos o pymes, durante las últimas semanas.
En el sector se reconoce que, desde las últimas semanas, se comenzaron a tomar diferentes medidas para obligar a los clientes a acudir a las sucursales con toda la documentación necesaria para cumplir con la ley de prevención del blanqueo de capitales y de la financiación del terrorismo. Además de los avisos informativos, mediante SMS, carta o correo electrónicos, que han mantenido las entidades con aquellos clientes que tenían incompleta su documentación, los bancos han efectuado otra serie de actuaciones más coactivas. No sólo se han bloqueado cuentas, sino que también se han dejado inoperativos claves de banca por internet o, incluso, tarjetas de crédito.
Las entidades calculan que puede haber más de 1,5 millones de cuentas operativas a las que aún les falta la documentación requerida por la ley
De hecho, como ha podido comprobar Vozpópuli, en visitas presenciales a diferentes sucursales de todo el espectro bancario español, la pasada semana se amontonaron ya las quejas en las sucursales por parte de clientes que tenían ya suspendida su operativa, pese a que la fecha tope no expiraba hasta el pasado 30 de abril. En el sector se reconoce que, pese a que la mayoría de entidades han reforzado las plantillas de sus ‘call center’ para la actualización de la documentación requerida, ha sido imposible llegar a este lunes sin que se produzca ninguna incidencia.
Las entidades calculan que puede haber más de 1,5 millones de cuentas operativas a las que aún les falta la documentación requerida por la ley. Por tanto, quedarán bloqueadas. Pese a que BBVA anunció el pasado miércoles, durante la presentación de sus resultados trimestrales, que alargará el plazo para que sus clientes puedan presentar el DNI hasta el próximo 11 de mayo, fuentes del Ministerio de Economía confirman que no habrá prórroga ni para el plazo de presentación de la documentación al banco, que vence mañana, ni para la aplicación del bloqueo posterior de la cuenta que establece la ley. Aun así, los clientes que no hayan formalizado a tiempo el trámite dispondrán de tres meses para desbloquearlas aportando la documentación requerida. Además, la materialización efectiva de ese bloqueo podría demorarse por unos días, según fuentes del sector.
La petición de documentación sigue las exigencias fijadas en la normativa de prevención del blanqueo de capitales. La Ley 10/2010 sobre prevención del blanqueo de capitales y de la financiación del terrorismo impone a las entidades de crédito la obligación de identificar a todos sus clientes y personas con las que mantengan relaciones de negocio o realicen cualesquiera operaciones. Y es tajante en cuando a la obligatoriedad de bloquear la cuenta si el cliente no está debidamente identificado, aunque no precisa cómo debe materializarse ese bloqueo. Fuentes del sector reconocen que ese bloqueo podrá ser gradual, y comenzar por ejemplo con el bloqueo de la operativa en cajeros o por internet.
“Todos somos proclives a dejar las cosas para el último minuto”, indicó el presidente de la Asociación Española de la Banca (AEB), José María Roldán, al ser preguntado recientemente por la cierta alarma entre algunos clientes. Roldán explicó que se trata de una medida para cumplir con la normativa y que el bloqueo de la cuenta no tiene por qué llegar a producirse.
Adaptarse a la normativa
Desde el 30 de abril de 2010 las entidades bancarias tenían un plazo de 5 años para cumplir con la obligación de identificar a sus clientes, según contemplaba la Disposición transitoria séptima de la Ley 10/2010, de 28 de abril, de prevención del blanqueo de capitales y de la financiación del terrorismo.
La ley contempla sanciones para las entidades desde 60.000 a 150.000 euros para las entidades que no hayan identificado perfectamente a sus clientes
Con motivo de esta obligación legal las entidades han advertido de que a partir del 1 de mayo bloquearán las cuentas de aquellos clientes que no hayan aportado su DNI como forma de identificación suficiente tras haberle pedido el banco previamente que aportasen esta documentación Sin embargo, esta amenaza obedece en realidad al riesgo de sanciones a que se expone la banca por su defectuosa gestión, según reconocen diferentes asociaciones de defensa de clientes bancarios como Adicae.
Esta asociación explica que, tal y como se señala en la Ley de prevención del blanqueo de capitales, se considera infracción grave el incumplimiento de la obligación de aprovechar estos 5 años transcurridos desde 2010 para identificar a la clientela.
De esta forma, en los casos en los que el consumidor no haya entregado el DNI será la entidad la que deberá acreditar que se lo requirió y que, por tanto, ella cumplió su obligación. En caso contrario la sanción aplicable va desde un mínimo de 60.001 euros hasta el 1% del patrimonio neto del banco (sujeto obligado) o 150.000 euros (la mayor de las cantidades)