Caixabank es una de las entidades financieras afectadas por la quiebra de Thomas Cook, ya que concedió un préstamo de 51 millones de euros a la sociedad Thomas Cook Hotel Investments (TCHI), 'joint venture' constituida por el touroperador británico y el fondo LMAY.
El objetivo de TCHI era destinar dicho préstamo a la adquisición de hoteles en España y otros países mediterráneos. De hecho, ya había adquirido uno en Canarias y otro en Baleares, y se había marcado el objetivo de incorporar unos 15 en dos años.
"El crédito está respalado por activos turísticos (hoteles) de muy buena calidad", informaron a Europa Press en fuentes de la entidad que preside Jordi Gual.
Caixabank, confiada
Se desconoce aún cuál puede ser el destino de esta 'joint venture' participada al 50% por el touroperador británico y LMAY tras la quiebra del primero, que arrastraba una deuda cercana a los 2.000 millones de euros.
No obstante, fuentes de Caixabank confían en que el préstamo concedido no pase a engrosar la lista de créditos en mora, al estar respaldado por activos de primera calidad cuya ejecución no implicaría muchas dificultades.