Entre dos y tres puntos baraja el Ministerio para Asuntos Económicos rebajar sus previsiones de crecimiento para este año y la balanza la decidirá el INE. En lugar de adelantarse Estadística, como hizo el pasado septiembre, cuando la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, aprobó el cuadro macroeconómico de los Presupuestos de 2022, en el que mantenía sus previsiones, muy optimistas, dos días antes de que el INE realizara una rebaja drástica, ahora ha decidido esperar. "Haremos la revisión de previsiones el viernes esperando a datos importantes del INE", dijo ayer Calviño en la sesión de control.
Y es que la tardanza en revisar el cuadro ha colocado al Gobierno en una posición difícil: se encuentra en el 7%, muy por encima de todos los organismos, y tiene que presentar una rebaja ya ineludible por su obligación de remitir sus previsiones a la Comisión Europea antes del 30 de abril, cuando el resto se ha pronunciado.
Calviño ya ha admitido que mañana va a presentar una "rebaja significativa", aunque ha planteado que será "prudente" y "alineada con el resto de organismos". Esto le llevará en principio a bajar de la barrera psicológica para el Gobierno del 5%, ya que las previsiones más optimistas son del 4,8%, del FMI, y se han presentado precisamente la semana pasada, en unos Spring Meetings a los que acudió Calviño para presidir la reunión plenaria del Comité Monetario y Financiero Internacional (IMFC, en sus siglas en inglés) y compareció junto a la directora general del Fondo, Kristalina Georgieva.
Pero es que el Gobierno también va a actualizar su cuadro después de que la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) presentara sus previsiones antes de Semana Santa, entre las más pesimistas, del 4,3%. Y Calviño tiene que buscar el aval del organismo que preside Cristina Herrero antes de presentar las cifras. No obtenerlo supondría un golpe a su credibilidad y dificultaría el plácet de la Comisión Europea.
La aprobación de la AIReF no implica que haya que coincidir con su previsión pero sí que hay una banda próxima en la que situarse, y fuentes conocedoras apuntan que un 4,8% la rebasaría. Sin embargo, si el INE avanza un dato del primer trimestre que permita sustentar una cifra cercana al 4,8%, la AIReF podría dar su visto bueno, señalan las mismas fuentes. Calviño, que anunció el jueves en Washington que presentaría el cuadro el pasado martes en el Consejo de Ministros, decidió el fin de semana esperar a mañana, día en el que el INE publica el avance. Estos datos le llegan hoy embargados a la vicepresidenta. Hoy, además, se publica la EPA del primer trimestre.
Los tiempos de Calviño
En la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros del 21 de septiembre, Calviño presentó de improviso el cuadro macro que acompaña a los Presupuestos de 2022, tres semanas antes de que se aprobaran las Cuentas. En un tono triunfal, Calviño no se movió de su discurso de antes del verano, estimó que la economía recuperaría el nivel prepandemia antes de final de año y mantuvo en el 6,5% su previsión de crecimiento para 2021 y en el 7% la de 2022. La vicepresidenta adelantaba así en algo más de medio año la salida de la crisis respecto al resto de instituciones. Sorprendió entonces la mención que hizo a que en realidad esta recuperación sería en términos de "PIB diario", un indicador desconocido hasta el momento.
Sólo dos días más tarde, el 23 de septiembre, el INE rebajó casi dos puntos el PIB del segundo trimestre al 1,1%. Desde la AIReF mostraron entonces su sorpresa con estos tiempos y lamentaron haber avalado las previsiones del Gobierno sin haber conocido el dato del INE.
Por debajo de las previsiones de la AIReF se ha situado BBVA, con un 4,1%, y por encima, además del FMI, que coincide con Funcas, Banco de España, con un 4,5%.