Santander ha conseguido que la agencia tributaria francesa le devuelva determinadas retenciones sobre el pago de dividendos efectuadas sobre un puñado de fondos de inversión y algunas sicavs, después de haberlas reclamado judicialmente.
Y la cosa no quedará sólo en Francia: el grupo reconoce haber entablado “reclamaciones judiciales y administrativas en varias jurisdicciones europeas”, para lo cual ha contratado a un despacho de abogados “especializado, con implantación en dichos países”.
Esta es una engorrosa práctica que las entidades deben realizar, ya que en numerosas ocasiones los pagos de dividendos a las carteras llevan retención en origen. La Comisión Europea ya estableció mediante directiva que esos cargos debían ser liberados pero en numerosos casos deben ser reclamados a través de despachos de abogados especializados en este tipo de tareas.
Francia, la más complicada
Fuentes financieras señalan que la agencia tributaria francesa es la más complicada de trato para resolver estos asuntos, por tratarse de un estado excesivamente burocrático e incluso proteccionista. Pese a lo que diga Bruseñas, si no se reclaman esos abonos, es casi seguro que el estado galo no los realizará motu propio.
De momento, las devoluciones alcanzan a 18 fondos de inversión, todos con carteras internacionales y unas cuantas sicavs, sobre las que se han conseguido retornos de 11,4 millones de euros, según recoge la publicación especializada Funds People.
'Family & Friends' de los Botín
Como sicav más destacable está Cartera Mobiliaria, una sociedad de inversión que puede considerarse de family & friends de la familia Botín. Este instrumento ha obtenido 168.170 euros en concepto de devolución neta de gastos.
Cartera Mobiliaria cuenta con 267 millones de euros de patrimonio, pero ha vivido épocas mejores, ya que llegó a contar con alrededor de 600. Esta sociedad es la resultante de la fusión de varias a mediados de la pasada década, cuando las Sociedades de Inversión Mobiliaria (SIM) debieron transformarse en sicavs.
Muy antiguas
Estas SIM tenían muchos años de antigüedad, eran instrumentos cotizados cerrados y fueron fundadas con capital de la familia Botín y personas afines, especialmente clientes preferentes del banco. Eran tiempos en los que la banca privada y los instrumentos de inversión no estaban desarrollados en España.
Otro ejemplo puede ser Financiera Ponferrada (Fiponsa), aunque esta sociedad está en Merrill Lynch, no en la órbita Santander. En su consejo figuran personas de la relevancia de Matías Rodríguez Inciarte.
Algunas de estas sociedades existen en España desde los años 50, incluso antes de la existencia de los fondos de inversión. Constituían un vehículo totalmente VIP entonces.
En Cartera Mobiliaria figura como presidente Gonzalo Milans del Bosch, hombre siempre asociado a las inversiones de cartera y participaciones estratégicas del banco y en su consejo también aparece Ángel Jado, consejero de Santander.
Este proceso de ‘pelea’ por las devoluciones es habitual en el sector. Está inmerso en el la práctica totalidad de instituciones con cartera internacional, “aunque no entendemos por qué Santander la ha hecho pública”, señalan desde una de las mayores gestoras. “Nosotros estamos continuamente en eso y tenemos un bufete muy de nicho trabajando para ello. Es bastante dinero al final que si no se logra, se le quita al cliente”, señalan.
En el caso de Cartera Mobiliaria supone devolver al inversor una rentabilidad cercana al 0,1%.