El Juzgado de lo Mercantil número 9 de Barcelona ha designado como administrador de Convergencia Democrática de Cataluyna a Jordi Safons, abogado y economista bregado en más de un centenar de concursos de acreedores, del despacho Compas Concursal.
El partido político que fundara Jordi Pujol a mediados de los años setenta del pasado siglo en el monasterio benedictino de Montserrat, queda ahora bajo la tutela judicial de un profesional en concursos de acreedores. Jordi Safons tendrá que administrar la liquidación de unas siglas que reinaron en Cataluña durante más de tres décadas, y que hoy se encuentran en el fango.
Caixabank, Sabadell y Santander (que hereda una deuda de Popular) figuran entre los principales acreedores financieros del partido político, con un pasivo superior a los 4 millones de euros, según informaciones publicadas. La deuda con los bancos proviene de créditos electorales, en litigio en el Tribunal Supremo.
Convergencia afronta además el embargo de 15 sedes por el caso Palau. El partido ha sido condenado a devolver 6,6 millones de euros por el cobro de comisiones ilegales a través del Palau de la Música.
Convergencia ha sido condenada a devolver 6,6 millones de euros por el cobro de comisiones ilegales a cambio de obra pública
A finales del pasado año, el abogado de Convergencia y de algunos de sus líderes, Francesc Sánchez, presentó preconcurso de acreedores para la formación política en el juzgado de Barcelona. La medida permite a una sociedad negociar con sus acreedores un convenio que evite la declaración de concurso, durante tres meses.
Según publicó el diario El País en 2017, Francesc Sánchez recibió el encargo de traspasar todos los activos y los pasivos de la antigua Convergencia al actual Partit Demòcrata Europeu Català (PDECat), antes de poder liquidarla.
Convergencia formó parte entre 1978 y 2015 de CiU, que gobernó Cataluña entre 1980 y 2003. En 2016 pasó a denominarse PDECat
El juzgado de Barcelona declaró a Convergencia en concurso de acreedores el pasado día 8 de junio, como voluntario. La declaración del concurso se ha publicado este sábado 11 de julio; los acreedores del antiguo partido deben comunicar sus créditos al juzgado en el plazo de un mes.
Si durante el proceso de liquidación de la formación, el concurso pasara a calificarse como culpable, debido a determinadas inconsistencias contables u otras irregularidades, los responsables de la formación podrían ser inhabilitados para administrar bienes ajenos o responder con su patrimonio ante los acreedores.
Nacionalismo, independentismo y corrupción
La progresiva deriva política de la antigua Convergencia hacia el independentismo se ha ido acelerando en los últimos años coincidiendo con la aparición de múltiples casos de corrupción que afectan al partido fundado por Jordi Pujol.
Si Convergencia no se ha liquidado antes, manteniendo la personalidad jurídica y declarándose ahora en concurso de acreedores, cuatro años después de que la formación disolviera su imagen pública, posiblemente se deba a las deudas millonarias que mantiene con los bancos y la justicia.
Convergencia formó parte entre 1978 y 2015 de Convergència i Unió (CiU), federación constituida junto a Unión Democrática de Cataluña, que gobernó Cataluña entre 1980 y 2003.
La familia Pujol es investigada desde hace ocho años por la comisión de presuntos delitos de blanqueo y organización criminal
En el año 2012, Artur Mas sucedió a Jordi Pujol como presidente del partido. En 2016, la formación, unos meses después de su ruptura con UDC, instalada ya en un viraje evidente hacia el independentismo, pasó a denominarse Partit Demòcrata Europeu Català (PDECat), aunque mantuvo su personalidad jurídica. En la actualidad forma parte de Junts per Catalunya, liderado por Carles Puigdemont.
Jordi Pujol, que presidió la Generalitat durante 23 años, admitió, en 2014, a través de un comunicado, que él y su familia habían mantenido una herencia millonaria en Andorra sin declarar.
El pasado mes de mayo, el Tribunal Supremo consideró probado que la formación había cobrado comisiones ilegales, 6,6 millones de euros, a cambio de obra pública a través del Palau de la Música.
Oriol Pujol, el único de los siete hijos de Jordi Pujol y Marta Ferrusola que se dedicó a la política, ex número dos de Convergencia, fue condenado a dos años y medio de prisión por el caso ITV.
Desde hace ocho años, la familia Pujol es investigada por la presunta comisión de delitos de blanqueo de capitales, contra la hacienda pública, falsedad en documento mercantil y organización criminal.