Decía Florentino Pérez hace unos días que la crisis económica que ha generado el coronavirus impedirá al Real Madrid hacer un fichaje 'galáctico' para la próxima temporada. “La situación es mala”, añadía. Este verano es el más raro que se recuerda, y no sólo por la preocupación que se deriva de la pandemia, sino por la falta de algunas noticias que son habituales durante la época estival. Entre ellas, la de los fichajes radiofónicos.
Las tres cadenas comerciales españolas repetirán alineación para la próxima temporada, casi con toda seguridad. La situación del negocio es compleja y no aconseja grandes aventuras. Según la consultora i2P, la publicidad en radio se desplomó el 34,4% durante el primer semestre de 2020, en comparación con el mismo período del año anterior. Eso se tradujo en un recorte de ingresos de 76,7 millones de euros.
Eso llevó a la Cadena SER a presentar un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) sobre su plantilla que implicó una reducción del 10% del salario para sus casi 1.000 trabajadores y la suspensión temporal -hasta el 12 de julio- de más de 250 contratos.
El Grupo COPE, que había anunciado beneficios de 5,5 millones de euros tras un incremento de sus ingresos del 8,5%, se vio obligado a suspender el dividendo, de 5,1 millones de euros por prudencia, tal y como se desprende del informe que realizó KPMG sobre sus cuentas de 2019.
Onda Cero pertenece a un grupo, Atresmedia, que no ha presentado un ERTE sobre su plantilla, pero que poco después de que se estableciera el estado de alarma elaboró un plan de ahorro que incluyó, entre otras cosas, recortes en los sueldos de su cúpula y de sus comunicadores.
Situación de inicio
Con estos mimbres, y con la amenaza de un otoño complejo, se iniciará la nueva temporada radiofónica, en la que ninguna de las tres grandes cadenas comerciales presentará cambios en su parrilla.
La Cadena SER fiará su mañana a Àngels Barceló por segundo año, después de un debut que no ha sido todo lo bueno que podría esperarse. La locutora catalana tomó las riendas de Hoy por Hoy con 2.872.000 oyentes y en la primera oleada del EGM en la que se 'examinó' obtuvo 2.814.000. En la siguiente, la del pasado abril, mejoró hasta los 2.832.000, aunque no logró rebasar la barrera de audiencia que le dejó Pepa Bueno.
Si Barcelò mira por el retrovisor, encontrará cada vez más cerca a Carlos Herrera (COPE), que en el primer tramo de 2020 logró una audiencia de 2.443.000 oyentes. La evolución de la radio de los Obispos ha sido muy positiva en los últimos años, pues Herrera cogió las riendas de las mañanas con menos de 1 millón de seguidores diarios y rápidamente duplicó el dato. Hasta entonces, esta cadena perdía dinero, mientras que actualmente registra beneficios.
Ahora bien, la llegada de la covid-19 le ha obligado a elaborar planes de contingencia para evitar que las cuentas se tiñan de rojo, tal y como se recoge en su memoria de cuentas de 2019. Por otra parte, conviene recordar que este grupo carga con la 'losa' de 13 TV, un canal que ha perdido decenas de millones de euros en la última década y que registra una audiencia residual en la TDT.
Onda Cero también está previsto que mantenga a Carlos Alsina al frente de sus mañanas radiofónicas. En la última oleada del EGM, logró 1.195.000 oyentes de media, lo que supuso una mejora de 21.000 con respecto a la última oleada de 2019. Por su parte, Las Mañanas de RNE, con Íñigo Alfonso y Pepa Fernández, obtuvieron 997.000 seguidores, tras ganar 121.000.
Pese a los múltiples cambios acaecidos en la radio pública durante las últimas semanas -consecuencia de la guerra interna que se ha vivido en RTVE-, no se espera que Alfonso abandone el micrófono matinal. Ahora bien, Marc Sala, quien hasta ahora comandaba La noche en 24, en el Canal 24 Horas, se hará cargo del espacio vespertino de RNE-1 (20.00 – 23.30), en sustitución de Antonio Delgado.
Los deportes
A pesar de que algunos medios de comunicación se hicieron eco de la posibilidad de que Manu Carreño abandonara El Larguero, de la Cadena SER, especialmente cuando perdió el trono de la radio deportiva nocturna en favor de Juanma Castaño (en la última oleada de 2019), lo cierto es que se espera que los micrófonos de la cadena de Prisa y la de los Obispos sigan ocupados por estos dos locutores.
También sería una sorpresa que José Ramón de la Morena no cumpliera su último año de contrato en Onda Cero, aunque es evidente que en la cadena de Atresmedia no están contentos, ni mucho menos, con los resultados de su programa, El Transistor. El locutor madrileño, con un sueldo de estrella de este medio de comunicación, es tercero en su franja, con 239.000 seguidores diarios.
Será interesante de cara a la próxima temporada observar la evolución de batallas como la que libran Pepa Bueno y Ángel Expósito en la franja vespertina -les separan 105.000 oyentes- o la de Carles Francino y Julia Otero en la sobremesa. O el de los programas deportivos de SER y COPE durante los fines de semana.
En cualquier caso, mientras otros años se publicaban diversos artículos sobre los proyectos de los fichajes del verano en este medio, en 2020 la noticia es que las cadenas tienen miedo a la evolución de la situación económica y han decidido ahorrar en gastos y en disgustos. Es decir, mantener a sus plantillas.