Telefónica está interesada en teléfonos móviles con cámara térmica y que además puedan ser lavados con agua y jabón tras su utilización, dos particularidades muy interesantes para combatir el coronavirus. Tal y como ha podido saber Vozpópuli, la compañía que dirige José María Álvarez-Pallete ha iniciado contactos con CAT Phones, fabricante de este tipo de terminales. El objetivo es disponer cuanto antes de equipos con estas características. En Portugal, Vodafone ya ha cerrado un acuerdo con esta compañía para comercializar sus dispositivos.
El interés por empresas y organismos en poseer soluciones rápidas para contener la pandemia del coronavirus se encuentra detrás de la iniciativa del operador de telecomunicaciones español. No hay que olvidar que el teléfono es un transmisor instantáneo de información, y disponer de un dispositivo móvil con un medidor de temperatura corporal permite, entre otras cosas, enviar en tiempo real las particularidades térmicas de una persona allí donde se necesiten esos datos, algo muy interesante para combatir el COVID-19.
También pueden usarse para el análisis de la población a pie de calle por parte de los servicios de emergencia o los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado. La velocidad de procesamiento de la temperatura permite agilizar el proceso al máximo.
Existen soluciones modulares que se pueden ensamblarse a la cámara del móvil y usarse, en combinación con aplicaciones, como un medidor térmico, pero no son tan precisas
Es una posibilidad especialmente interesante para los hospitales, que estos días se encuentran al límite -o por encima- de su capacidad. El hecho de que puedan ser desinfectados con agua y jabón en cualquier momento es otro de sus valores añadidos.
El único fabricante de móviles que ofrece integrado una cámara térmica de la marca FLIR -una de las más fiables del mercado- es la citada norteamericana CAT Phones. Es cierto que existen soluciones modulares que se pueden ensamblarse a la cámara del móvil y usarse, en combinación con aplicaciones, como un medidor térmico, pero no son tan precisas.
De la obra al hospital
CAT Phones está dedicada al desarrollo de teléfonos 'todoterreno' o denominados formalmente rugerizados -reforzados-. Soportan golpes, se pueden mojar y algunos modelos incluyen, como hemos comentado, medidor térmico.
Es el caso del modelo S61, enfocado a los servicios de emergencia y empresas de construcción y cuyo coste es de 899 euros. Puede detectar huellas de calor -para saber dónde, por ejemplo, ha estado tumbada una persona-, medir la temperatura en suelos radiantes, radiadores, ventanas -para detectar fugas- u hormigón -para saber en qué momento preciso usarlo-.
En su web, Cat Phones destaca que el S61 puede transformarse para un uso sanitario. "Originalmente ha sido diseñado para identificar anomalías de temperatura para servicios de emergencia, seguridad y construcción. Se puede configurar fácilmente para identificar y resaltar a las personas que potencialmente tienen fiebre mientras ingresan o pasan a través de un lugar público congestionado".
