La caída de ventas de automóviles provocada por la crisis del coronavirus y las limitaciones de movilidad impuestas por el Gobierno ha llevado a que el uso del coche haya decaído de manera notable y, como consecuencia de todo ello, a que la demanda de neumáticos haya bajado, tanto en la propia industria española donde fabrican turismos como en los talleres de recambio. La caída en torno al 30% ha llevado a Michelin a ampliar los expedientes de regulación de empleo temporales en sus cuatro fábricas españolas, nuevos ERTE que se extenderán hasta el próximo mes de octubre ampliando así los que están todavía activos.
Así, la dirección de Michelin en España ha planteado un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) de cuatro meses de duración para las factorías de Vitoria, Almería, Aranda de Duero (Burgos) y Valladolid, y también los centros de trabajo de la división comercial. La dirección de la empresa y los sindicatos han celebrado ya la primera reunión para negociar el ERTE, que tendrá una afección máxima por trabajador de 70 días y que recoge el mantenimiento del empleo, según ha informado UGT.
El fabricante de neumáticos ya había presentado ERTE en vigor por causas de fuerza mayor asociadas a la crisis del coronavirus y, ahora, ha presentado otro para vincularlo con las causas productivas y organizativas, al detectar pérdidas de actividad relacionadas también con la pandemia. CCOO ha explicado en este sentido que las medidas de limitación de la movilidad que se han adoptado para frenar la expansión del covid-19 se han traducido en una caída de la demanda de neumáticos superiores al 30% en algunos de los sectores.
Ante esta situación, la empresa propone un ERTE que empezará el próximo día 18 del presente mes de mayo y finalizará el 15 de septiembre en las fábricas de Vitoria, Almería, Aranda de Duero, y Valladolid. En el caso de la división comercial el periodo de aplicación irá del 1 de junio al 30 de septiembre. La reunión celebrada entre empresa y trabajadores ha servido para que Michelin presente el ERTE a los sindicatos, que volverán a reunirse en los próximos días para comenzar a negociar las condiciones en las que se implante el expediente.
Los sindicatos quieren, entre otras cuestiones, que la empresa ofrezca un complemento salarial a la prestación por ERTE y que las pagas extras y las vacaciones no se vean afectadas. En total, la multinacional francesa cuenta con más 10.000 trabajadores en las plantas españolas
Facturación en el primer trimestre
Una crisis que lógicamente está afectando al fabricante de neumáticos a nivel mundial, cuya facturación cayó un 8,3% en el primer trimestre, lastrada por la pandemia del covid-19. El fabricante francés facturó algo más de 5.300 millones de euros durante entre enero y marzo, lo que supone una disminución del 8,3% en comparación con los 5.809 millones que ingresó en el mismo periodo de 2019.
Según datos de la compañía, la covid-19 hizo que la demanda de neumáticos en todo el mundo se resintiese en el primer trimestre debido a las medidas de confinamiento con una caída del volumen de ventas de 11,7% que se aceleró especialmente en marzo, cuando bajó un 21 %. Para soportar el peso de esta crisis, Michelin ha puesto en marcha desde mediados de marzo una serie de medidas como una reducción de la inversión de hasta 500 millones de euros, así como una bajada de 330 millones de euros en los dividendos que propone a sus accionistas, una congelación de los programas de compra de acciones para todo 2020 y la reducción de costes estructurales.
El fabricante señala que pese a partir de la hipótesis de una pérdida de volumen en el ejercicio actual del entre el 20% y el 30 %, dispone de liquidez para hacer frente a sus líneas de crédito. "Esta situación excepcional refuerza nuestra convicción de que el futuro del grupo reposa en el equilibrio entre el compromiso de sus equipos, sin los que nada sería posible, el desarrollo sostenible de sus actividades y su solidez financiera", destacó en el comunicado su presidente, Florent Menegaux.