Nuevos movimientos en el pacto parasocial del Banco Santander. La entidad ha comunicado este martes mediante hecho relevante a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la salida de dicho acuerdo de la sociedad Latimer, que históricamente ha representado a la Fundación Botín.
La mercantil traspasó en julio de 2015 todas sus acciones a la Fundación Botín y desde esa fecha ha estado prácticamente inoperativa. De esta forma, la sindicación se queda con una participación del Banco Santander de 93.453.560 acciones, lo que supone un 0,5624% del capital social del grupo.
Dicha fundación sigue estando presente mediante la participación de su presidente, Javier Botín, que ostenta un total de 23.928.566 títulos del grupo, valorado a precio de mercado en 88,2 millones de euros.
Este no ha sido el único movimiento que ha realizado la familia Botín este mes. De hecho, Ana Botín realizó su mayor compra de acciones de Santander los días 11 y 13 de diciembre. Un total de 3,2 millones de títulos, a un precio que osciló entre los 3,54 y 3,75 euros por acción y que provocó que se elevara su participación en el banco al 0,16%.
Movimientos de la familia
El mes pasado, la familia Botín se hizo con otros 10 millones de acciones, superando de nuevo el 0,5% del capital del banco. Según información enviada a la CNMV, el pasado 31 de octubre Agropecuaria El Castaño, Nueva Azil y Cronje, sociedades de la familia Botín, compraron, respectivamente, 6,3 y 1 millones de acciones de Santander, la mayoría a un precio de 3,61 euros por título.
La presidenta del banco mantiene la propiedad de acciones de Santander a través de Cronje y Pérgamo Inversiones. Cronje cuenta con 24.919.906 millones de acciones valoradas entonces a un precio de coste de adquisición de 91,4 millones. El valor en Bolsa de Santander baja este martes, a las 10 horas, más de un 1,2% cotizando a 3,68 euros por acción. El primer banco español alcanza un valor de mercado superior a los 61.000 millones de euros.
