La distribuidora brasileña Eletropaulo, cuyo control es disputado por los gigantes europeos Iberdrola y Enel, sufrió pérdidas por unos 1,5 millones de dólares en el primer trimestre de este año, según el balance enviado a sus accionistas.
La pérdidas de los tres primeros meses de este año contrastaron con el beneficio neto de unos 3,59 millones de dólares que la distribuidora registró en el primer trimestre del año pasado.
El balance negativo fue divulgado en medio de la disputa entre Enel y Neoenergía, la subsidiaria brasileña de la española Iberdrola, por el control de una compañía considerada estratégica por ser la responsable por la distribución en Sao Paulo, la mayor ciudad de Brasil.
Las dos energéticas europeas han hecho ofertas públicas de adquisición (OPA) por el control accionarial de Eletropaulo y la disputa será definida en una subasta prevista para el 4 de junio.
La última OPA de Enel se situó en unos 8,84 dólares por cada acción de la firma, mientras que la de Neoenergía ofreció unos 8,81 dólares por título.
Pese al resultado final negativo, Eletropaulo informó de que sus ventas brutas en el primer trimestre se elevaron a 5.204,8 millones de reales (unos 1.445,8 millones de dólares), con un crecimiento del 7 % con respeto a los tres primeros meses del año pasado.
La empresa atribuyó las pérdidas del primer trimestre al impacto negativo en el Ebitda (beneficio bruto de explotación) provocado por el fuerte aumento de los gastos con los sistemas de transmisión de energía y por el aumento del saldo financiero negativo hasta unos 32,5 millones de dólares.
Ese aumento de los gastos hizo con que el resultado operacional de la compañía cayera un 15,8% frente al primer trimestre del año pasado, hasta unos 31,5 millones de dólares en los tres primeros meses de este año.
En su balance la compañía dijo que a finales de marzo atendía a 7,2 millones de consumidores, entre residencias y empresas, a los que distribuía 8.044 gigavatios (GWh) de energía.
