Tras un tira y afloja durante las últimas sesiones, Ferrovial ha logrado poner la suficiente tierra de por medio respecto a ACS para poder ratificar que ha habido vuelco en el orden del sector constructor español en bolsa. La compañía controlada por la familia Del Pino ya vale algo más de 100 millones de euros más en el mercado que el grupo que ha estado al frente del sector durante las últimas décadas.
Al cierre de la sesión de ayer, la capitalización bursátil de Ferrovial se situaba en 6.616 millones de euros mientras que la de ACS se quedaba en 6.526 millones. Eso sí, las fuerzas se han igualado por abajo, lejos de los máximos históricos de ambas compañías. Y mucho más en el que caso del grupo que preside Florentino Pérez, que cotiza en su cota más baja de los últimos siete años, cuando aún no había ni atisbos de la crisis.
Sin duda, la clave ha estado en la recuperación que ha experimentado Ferrovial una vez asumido el castigo de los mercados por el varapalo financiero. Las acciones de la empresa presidida por Rafael del Pino llegaron a perder un 63% desde el inicio de la crisis pero se ha sabido levantar y de qué manera. Desde esos mínimos que marcó a finales del primer trimestre de 2009, la capitalización de Ferrovial ha recuperado un 126% y el balance global respecto al inicio de la crisis arroja un descenso del 15%.
ACS, presionada por su deuda
Mientras, la trayectoria de ACS ha sido todo lo contrario. El grupo de construcción y servicios acuso mejor el primer impacto, con un recorte del 40% en el precio de sus títulos. Sin embargo, lejos de recuperarse como Ferrovial, la compañía ha continuado perdiendo terreno de forma notable mientras la mayoría de sus competidores iniciaba la remontada. Así, desde aquel primer trimestre de 2009 de infausto recuerdo hasta ahora, ACS acumula un descenso extra del 20%, con lo que desde el inicio de la crisis, ACS se ha dejado algo más de un 50% en los mercados.
La compañía participada por Banca March, los Albertos y el propio Florentino Pérez está acusando su situación financiera, con una creciente deuda que se sitúa actualmente por encima de los 13.500 millones de euros y con problemas para llevar a cabo el plan de desinversiones que puso en marcha para reducir la cifra. ACS refinanció en 2011 más de 6.000 millones de euros, la mayoría de esta cantidad relacionada con la participación que la empresa mantiene en Iberdrola, con unos elevados tipos de interés.
Mientras, Ferrovial ha tenido más éxito a la hora de vender activos, entre los que destaca una participación en la autopista canadiense ETR-407 y un paquete de acciones del gestor aeroportuario británico BAA.