José María Castellano está moviendo todas las piezas posibles con el objetivo de evitar que Novagalicia Banco acabe subastado en su totalidad. Para ello, el plan de futuro que ha trasladado al Banco de España, que tendrá que contar también con el visto bueno de Economía, contempla la entrada de cinco fondos anglosajones que aseguran la recompra del 20% del capital (alrededor de 500 millones) del banco. Estos fondos convivirían con el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) hasta 2014, fecha en la que José María Castellano, presidente de la entidad gallega, defiende que el accionariado privado sustituiría al público en su totalidad.
Al estar Novagalicia nacionalizada mayoritariamente por el Estado, la ley establece que su venta sólo puede ejecutarse a través de una subasta. Esta fórmula, pero con alguna particularidad, es la que ha trasladado la entidad gallega al supervisor. Su esquema es que Novagalicia Banco se venda mediante un concurso público "sin precedentes" de más del 20 % de su capital. Proceso que, según Castellano, podría estar resuelto en junio. La entidad gallega debe esperar quince días para conocer si cuenta con el visto bueno del Banco de España y de Economía. "El plan tiene el apoyo del FROB", aseguran fuentes del sector. Sin embargo, desde un par de entidades grandes se da por sentado que Novagalicia acabará en una subasta, al estilo de la CAM o Unnim. "Las subastas de todas las entidades nacionalizadas e intervenidas tendrían que estar resueltas antes del verano", asegura en privado el presidente de uno de los grandes. "El Banco de España nunca ha visto con buenos ojos la entrada de fondos privados en las entidades. Cada vez que cualquiera de estos fondos han entrado en una subasta no han pasado el corte del supervisor. No pensamos que ahora vaya a suceder lo contrario", asumen desde un banco de inversión.
Tras descartar la subasta pública, para evitar la venta de la entidad por un euro, como ha ocurrido en otros casos, Castellano defiende de que el Banco de España sabe ya de los cinco inversores que podrían presentarse al concurso y cree que "tiene viabilidad". Este proceso, que cuenta con dos informes jurídicos externos y la aprobación del FROB, representado en un 90 % de la entidad, cuyo consejo de administración aprobó el plan por unanimidad, supondría un "menor coste social", al mantener oficinas y el centro de decisión en Galicia, y también un sentido económico para el Estado.
A diferencia del resto de subastas que se han registrado hasta ahora, estos cinco fondos están dispuestos a entrar en Novagalicia con un Esquema de Protección de Activos (EPA) del 50% de las posibles pérdidas futuras y no del 100%. De ese 50%, los fondos asumirían el 25%, mientras que el Estado el 75% restante. En otras subastas, como la de la CAM, el Estado ha cubierto el 80% de todas las pérdidas futuras, mientras que el Sabadell se ha hecho cargo del 20% restante.
La entidad gallega acude a la subasta con un fuerte saneamiento inmobiliario, fruto de las exigencias del nuevo decreto de reforma financiera. Durante el último ejercicio, Novagalicia ha destinado 1.600 millones para limpiar su balance del ladrillo, además de otros 800 millones en forma de colchón de capital. Este esfuerzo ha lastrado las cuentas de las entidad gallega que cerró 2011 con unas pérdidas de 168,7 millones, de los que 69,5 millones fueron de NCG Banco.
Estas cifras, según González-Bueno, revelan ajustes y una gestión activa de la crisis desde 2011, con un incremento de liquidez de más de 3.000 millones ayudado por las medidas del Banco Central Europeo. A jucio del consejero delegado de la entidad, las cifras convierten a la entidad en "atractiva para otros bancos e inversores internacionales".
El presidente de NCG Banco ha continuado con este argumento al recordar que el plan de recapitalización contempla la entrada de inversores privados minoritarios por un importe de entre el 20 % y el 51 %, y que podría situarse entre los 500 y 1.000 millones, ha concretado.
El presidente de NCG Banco viaja hoy a Londres para abordar este proceso con los inversores, que no se conocen entre ellos, ha dicho, ni las cantidades que aportarán, y ha precisado que los cinco "no van a ser compatibles" por sus relaciones profesionales.
Los que se queden han de saber que "tienen que convivir con el FROB", ha advertido, pues el objetivo es perseguir maximizar el valor de la inversión del Estado, lo que podrían lograr con la salida a bolsa del banco.
Una solución para las preferentes
En paralelo al plan de la entidad, Castellano confía en poder ofrecer, a lo largo del próximo mes de junio, una solución para los 43.000 clientes que suscribieron participaciones preferentes por valor de 937 millones. Según la actual normativa, las entidades en pérdidas, situación actual de Novagalicia, no pueden remunerar el cupón a los tenedores de este tipo de productos.
Desde la entidad confían en lograr una "solución razonable". Para ellos, representantes de Novagalicia mantendrán una serie de encuentros con asociaciones de afectados a los que ha comprometido abordar el tema "con luz y taquígrafos". "Lo vamos a arreglar pero necesitamos tiempo", asegura González Bueno, quien adelantó que han abierto una oficina para atender este asunto.