La última visita del Rey don Juan Carlos a Arabia Saudí, acontecida este fin de semana y de marcado carácter comercial, se saldó con un fruto por el momento intangible pero que podría concretarse en numerosos y jugosos contratos para empresas españolas. Una comitiva de empresarios saudíes se presentará en septiembre en Madrid, invitados por el Rey, para la celebración de una gran cumbre con el objeto de estrechar aún más los lazos comerciales entre ambos países.
En esta ocasión, la presencia de don Juan Carlos en suelo saudí fue más corta de lo habitual por lo que no hubo demasiado tiempo para abordar cuestiones concretas. Durante las reuniones sí se habló de los planes del Gobierno saudí para desarrollar infraestructuras en su país, planes a los que destinará más de 200.000 millones de dólares y del papel que representarán las empresas españolas en él.
De ahí la importancia de la cumbre que se celebrará en septiembre y que supondrá la ventaja para los empresarios españoles de dirimir en casa cuestiones tan importantes como contratos en el exterior, cuando la licitación de obra pública en España continúa de capa caída.
Por el momento, las compañías españolas ya se han llevado varios contratos en Arabia Saudí, dos de ellos valorados en más de 6.000 millones de euros: la línea de alta velocidad entre La Meca y Medina, adjudicada al consorcio Al-Shoula, y la construcción de tres líneas del metro de Riad, la capital del país, a un grupo liderado por FCC.
Muy pendientes de Adif
Sin embargo, aún resta mucho por hacer, especialmente en el ámbito de los ferrocarriles. En este sentido, dos empresas públicas españolas, Renfe y Adif, están inmersas en uno de los procesos más llamativos: el de la gestión y operación de un corredor ferroviario que articula el país de norte a sur y que permite el transporte tanto de pasajeros como de mercancías, a lo largo de más de 2.700 kilómetros.
Las ofertas se presentaron hace unas semanas pero la decisión definitiva sobre la adjudicación del contrato se conocerá aproximadamente a finales de año. Las expectativas en el seno de Adif son muy elevadas en relación con este contrato, que ratificaría la posición de la empresa en Arabia Saudí, toda vez que también participa en el consorcio que construye el AVE entre La Meca y Medina.
Fuentes del Consejo de Cámaras de Arabia Saudí citadas por la prensa local estiman en algo más de 14.000 millones de dólares el importe de los contratos que se han firmado recientemente con empresas españolas. Entre ellos destaca el logrado por el grupo de ingeniería Técnicas Reunidas, que llevará a cabo un complejo de gasificación integrada de ciclo combinado en la provincia saudí de Jazan por un montante total de unos 1.700 millones de euros.
El Rey está llevando a cabo un amplio periplo por tierras de Oriente Medio que ha incluido países como Bahrein, Emiratos Árabes y la propia Arabia Saudí, en los que cuenta con un gran predicamento gracias a sus buenas relaciones con las familias reales de estos estados.
Todas estas visitas han tenido un marcado carácter comercial y empresarial, como ilustra el hecho de que don Juan Carlos se ha hecho acompañar de los titulares de Fomento, Ana Pastor; Industria, José Manuel Soria; y Defensa, Pedro Morenés.
El papel comercial del Rey
Numerosas empresas españolas que ya trabajan en Arabia Saudí reconocen en privado la importante labor del Rey a la hora de encontrarse con un escenario favorable para la consecución de los contratos. El país de Oriente Medio es uno de los grandes actores actualmente en el sector de las infraestructuras por lo que numerosos países están llamando a su puerta para tratar de lograr oportunidades para sus empesas.
En esta situación, un encuentro en territorio español constituye una oportunidad única para conseguir una posición favorable con vistas a conseguir nuevos contratos.
El encuentro entre empresarios saudíes y españoles en Madrid también está patrocinado por la Cámara Hispano-Saudí.