La mayor inmobiliaria española no cotiza en Bolsa, no es una Socimi, está domiciliada en Arteixo (A Coruña), sólo tiene nueve empleados y un consejo de administración integrado por dos hombres y una mujer. Pontegadea Inmobiliaria, de Amancio Ortega, ha superado a las grandes compañías del sector en España por valoración de activos con una estructura societaria que dista mucho de las complejas organizaciones de otras inmobiliarias.
La empresa del fundador y primer accionista de Inditex cerró el año 2014 con activos valorados en 5.593 millones de euros, 1.074 millones más que en 2013. Si a esa cifra se suman las inversiones que durante 2015 ha realizado Pontegadea Inmobiliaria, el valor de los activos de la empresa se acercará en la actualidad a los 7.000 millones de euros. Pontegadea Inmobiliaria adquirió en enero la sede en Londres del grupo Rio Tinto por 335 millones de euros; ese mismo mes compró Gran Vía 32, en Madrid, por unos 400 millones, donde la compañía de moda Primark abrirá a finales de año su mayor tienda en España; y en abril se hizo con otro céntrico edificio en Londres, por 550 millones, que también tiene como inquilino a Primark.
Colonial, la inmobiliaria que tiene como primer accionista a Villar Mir, cerró el primer semestre del año con activos valorados en 6.291 millones de euros. La que fuera considerada como la mayor inmobiliaria española, Metrovacesa, controlada ahora por Santander, terminó el ejercicio pasado con inmuebles valorados en 4.800 millones. Merlin Properties, la mayor Socimi española, acordó en junio la compra de la filial inmobiliaria de Sacyr, Testa, por 1.794 millones de euros; con la operación Merlin poseerá una cartera de activos con una valoración bruta superior a los 5.500 millones de euros.
Pontegadea explica en sus cuentas -las del ejercicio 2014 han sido depositadas en Registro Mercantil recientemente- que el valor razonable de los inmuebles se determina de forma individual "considerando cada uno de los contratos de arrendamiento vigentes a fecha de valoración" y siguiendo los estándares de valoración de organismos europeos.
La cartera de Pontegadea está compuesta fundamentalmente por edificios de oficinas, no residenciales, situados en el centro de grandes ciudades en España, Reino Unido, Francia, y Estados Unidos. En 2014 ocupaban una superficie total de 341.285 metros cuadrados. Amancio Ortega suele cerrar las operaciones de adquisición de inmuebles a principios o finales de año, invirtiendo parte del dinero que obtiene por dividendos de Inditex (entre 2010 y 2014 ha percibido3.924 millones de euros en dividendos de la multinacional española).
Entre otros edificios representativos propiedad de Pontegadea Inmobiliaria, además de los ya mencionados, se encuentran Torre Picasso, en Madrid, comprado en 2011 a FCC, por 400 millones; Devonshire House, en Londres, adquirido por 447 millones de euros en 2013; o los diez edificios de Santander en España comprados en el año 2007 por 387 millones.
Amancio Ortega es presidente de Pontegadea Inmobiliaria; su esposa Flora Pérez Marcote es vicepresidenta; y José Arnau Sierra, vicepresidente de Inditex, figura como secretario de Pontegadea Inmobiliaria. De los nueve empleados de la sociedad, seis hombres y tres mujeres, siete directivos cobraron en total en 2014 un millón de euros, la misma cantidad que en 2013.
Las cuentas de 2014 de Pontegadea Inmobiliaria son las primeras que audita Deloitte, que ha sustituido a KPMG. Los honorarios recibidos por Deloitte por su trabajo en la inmobiliaria de Amancio Ortega fueron de 35.000 euros, 11.000 euros menos que los que cobró KPMG en 2013.
