Chile 'pesca' en España para gestionar su crisis de imagen. El Gobierno del país latinoamericano negocia contratar a Antonio Gutiérrez-Rubí, consultor de comunicación y director de Ideograma, para ayudar a gestionar la crisis de reputación en la que se ha sumido el país por las protestas contra el Ejecutivo que preside Sebastián Piñera.
Gutiérrez-Rubí (Barcelona, 1960) es un reconocido asesor de comunicación política que ha trabajado para diferentes partidos políticos, dirigentes (del socialista Alfredo Pérez Rubalcaba al popular Juan Manuel Moreno Bonilla) y también empresas. Colabora habitualmente con columnas de análisis para medios de comunicación como El País o El Periódico de Catalunya.
El consultor es autor de más de una quincena de libros y ha sido premiado en varias ocasiones en los Victory Awards, los llamados Oscars de la comunicación política.
La elección de Gutiérrez-Rubí para esta misión no es baladí. El experto en comunicación política ya trabajó para el político chileno Joaquín Lavín, actual alcalde de Las Condes, quien según apunta la prensa del país es el dirigente con más papeletas para suceder a Piñera.
La gran crisis de Chile
El país latinoamericano lleva algo más de un mes sumido en una fortísima crisis social y política después de que estallase una oleada de protestas contra el actual Gobierno.
El origen de las revueltas está en un anuncio del Gobierno para subir las tarifas del metro de Santiago de Chile, una decisión que prendió la mecha del descontento social y que ha derivado en una oleada de manifestaciones para protestar por el sistema de pensiones, el sistema educativo y los bajos salarios, entre otros asuntos.
Los chilenos llevan ya más de un mes de manifestaciones y, por ahora, no hay visos de que se vaya a solucionar a corto plazo. El Gobierno ya ha frenado la subida de las tarifas del metro y se ha puesto sobre la mesa una reforma de la Constitución, pero el malestar por las desigualdades del país todavía sigue vivo. En cifras, las protestas se han saldado por ahora con más de 17.000 detenidos, un centenar de heridos y una veintena de fallecidos.