Economía ha bautizado el 'banco malo' como Sareb. Esta Sociedad Gestora de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria se constituirá como sociedad anónima y tendrá un tamaño máximo de entre 85.000 a 90.000 millones de euros, aunque fuentes del ministerio que dirige Luis de Guindos aseguran que el volumen final de activos será "menor". "Se ha tenido un cuenta un colchón de seguridad importante", explican estas mismas voces.
En Economía no se descarta que la Sareb pueda generar pérdidas en los primeros ejercicios de sus 15 años de vida. Si así fuera, la sociedad podrá financiarse con fondos del rescate bancario europeo. En ningún caso, precisan en el ministerio, el banco malo incrementará la deuda pública española. Estará financiado en un 10% con liquidez que aporten los inversores privados y el FROB, y el 90% restante a través de emisiones de títulos de la Sareb que contarán con el aval del estado.
Será, por tanto, una sociedad anónima a la que se le transferirán los activos (inmuebles) adjudicados desde 100.000 euros. Esto quiere decir, como ya ha informado este medio, que los pisos más baratos, los conocidos como invendibles, no entrarán en el banco malo. El crédito promotor sí que entrará en gran cantidad, con un mínimo de 250.000 euros. Además, también se transmitirán las participaciones que tienen las entidades nacionalizadas o que reciban ayudas públicas en pequeñas inmobiliarias. "En ningún caso, se podrán llevar al Sareb las participaciones en grandes inmobiliarias, como pueda ser Metrovacesa", aseguran fuentes de Economía.
El diseño de la Sareb deja abierto que en el futuro puedan entrar otro tipo de activos problemáticos, como los préstamos al consumo a familias y Pymes, las hipotecas a particulares o cualquier otros activos deteriorados que afecten a la viabilidad de la entidad. El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria efectuará la definición del perímetro final de activos a transferir al banco malo. Mientras, el Banco de España será quien fije los precios de transferencia de los activos, a partir de las valoraciones realizadas en el ejercicio de Oliver Wyman. "El Banco de España determinará un ajuste a los precios señalando un porcentaje al valor en libros de los activos", explican en Economía. Cada tipología de activo tendrá su propio descuento.
De la sociedad matriz colgarán varios fondos diferentes en función de cada tipo de activo. Es decir, existirá un fondo de suelo, otro de promociones en curso, otro de viviendas terminadas... Estas filiales se denominan fondos activos bancarios y contarán con activos y pasivos totalmente flexibles, lo que facilitará la entrada de inversores privados. Esta fórmula es novedosa en España y se ha tenido que cambiar la legislación para poder concretar esta fórmula.
La Sareb tendrá un consejo de administración en el que habrá de 5 a15 consejeros, y un tercio de este consejo será independiente. La constitución de la sociedad se efectuará el 19 de noviembre (el decreto se aprobará en el Consejo de Ministros del 16 de noviembre) y el Banco de España contará con siete días hábiles para fijar los precios definitivos de transferencia. En la creación del Sareb no hará falta que haya socios privados en su accionariado. No obstante, cuando las entidades nacionalizadas empiecen a transmitir sus activos tóxicos, a partir del 30 de noviembre, sí deberá de tener inversores privados que cuenten con un mínimo del 55% de sus acciones.
Los inversores podrán pagar su participación en la S.A. con activos, títulos de deuda, capital o una mezcla de todo ello. Como ya se sabía, la mayor parte del banco malo recibirá suelo y promoción urbanística en todas sus fases de desarrollo. Los principales accionistas serán bancos, aseguradoras o sociedades de fondos de inversión