Entre los objetivos que se ha marcado la Unión Europea para 2020 se encuentra el de incrementar el peso de la industria en el conjunto de los Estados miembros hasta el 20% del PIB. En España, ese porcentaje es actualmente del 14%, por lo que se necesitarán unos años adicionales para cumplir con ese propósito. Así lo ha señalado este lunes la CEOE durante la presentación del informe La industria, motor de crecimiento: análisis y recomendaciones.
En el documento, recomienda a las autoridades españolas una batería de medidas que incluyen el mayor control aduanero para evitar la competencia desleal, una mejora de las infraestructuras, un cambio en el modelo energético que consiga un precio más competitivo de la electricidad, una reducción de impuestos o unas mayores facilidades para permitir el crecimiento y la digitalización de las empresas españolas.
El trabajo aporta una serie de datos que ponen de relevancia la importancia del sector industrial en la economía española. Actualmente, representa el 14% del Producto Interior Bruto y crea el 12,5% del empleo (2,3 millones). De esta cantidad, el 94,5% es a tiempo completo y el 78,7% de régimen indefinido, dos porcentajes superiores a la media nacional.
Según el informe, por cada euro que se reduce la demanda final industrial, la producción en su conjunto de la economía española se resiente en 3,11 euros, de ahí la importancia de incrementar su peso en el PIB, previo planteamiento de una estrategia que determine los sectores por los que el país quiere apostar, ha destacado el presidente de la Comisión de Industria y Energía de la CEOE, Guillermo Ulacia.
Para que este sector despegue, la CEOE considera necesaria una reducción de las “elevadas” cotizaciones sociales empresariales -”generaría más puestos de trabajo-, así como modernizar la negociación colectiva, flexibilizar los sistemas de contratación y despido; mejorar la Formación Profesional, poner coto al abstentismo laboral y actualizar los modelos de formación del personal.
También apela a reducir el impuesto de sociedades y modificar la legislación vigente para que las empresas pierdan el miedo a salir del entorno de las pymes (“el síndrome del empleado 49”) por las cargas impositivas que eso implica. La CEOE propone, asimismo, eliminar las dobles imposiciones y coordinar de una mejor forma las políticas tributarias.
Competencia desleal
Desde el punto de vista de la CEOE, se debe reforzar la vigilancia en las aduanas para evitar la entrada incontrolada de productos de terceros países que no cumplen con las homologaciones necesarias en el espacio comunitario y “destrozan” a la industria local. Para ello, entre otras cosas, propone que las comunidades autónomas doten de más recursos al personal encargado de dicha tarea.
En materia energética, recuerda que los costes de producción de electricidad no son en España más elevados que en el resto de la UE, aunque incide en que en Estados Unidos son hasta un 20% más baratos, lo que resta competitividad a la industria comunitaria. La CEOE considera que se debe mantener la apuesta por las energías renovables, así como definir un 'mix' de generación equilibrado, eliminar los impuestos a la generación de electricidad y extraer de la factura los costes ajenos al suministro eléctrico.
Para no claudicar ante la cuarta Revolución Industrial, en ciernes, los autores de este estudio recomiendan apostar decididamente por la innovación. En este sentido, proponen redoblar los esfuerzos por la digitalización de la industria española, adecuar el marco de la investigación a la necesidad de las pymes industriales, mejorar los sistemas de financiación de este tipo de iniciativas y apoyar la transferencia de tecnología entre los sectores tecnológicos y el mundo académico.
La patronal también ve necesario incrementar la inversión en infraestructuras después de varios años de crisis económica en los que estas partidas se han resentido considerablemente. Entre sus propuestas, se encuentra la de mejorar los servicios portuarios, la de extender la red ferroviaria hasta los centros productivos y la de impulsar los corredores de ferrocarril con ancho de vía internacional.