El Ministerio de Hacienda no ha perdido un minuto en actualizar y aprobar uno de los proyectos más ambiciosos en la carrera del ministro Cristóbal Montoro, el Suministro Inmediato de Información (SII). El BOE publicó ayer martes el Real Decreto que obligará a las medianas y grandes compañías españolas, unas 62.000, a informar prácticamente en tiempo real sobre el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA), lo que supondrá modificar su estructura contable.
La publicación ayer en el BOE del Real Decreto 596/2016, de 2 de diciembre para la modernización, mejora e impulso del uso de medios electrónicos en la gestión del Impuesto sobre el Valor Añadido, pilló a numerosos ejecutivos de Recursos Humanos y Contabilidad de medianas y grandes empresas españolas disfrutando de un día festivo. Pero la noticia corrió como la pólvora y amargó el día a más de uno, que ve prácticamente imposible disponer del tiempo necesario para actualizar la contabilidad de la empresa a los nuevos requerimientos de Hacienda. Y todo pocos días después de saber que el Gobierno subirá el impuesto de sociedades.
La Agencia Tributaria ya anunció en 2014 la puesta en marcha del proyecto SII, que debería entrar en vigor en enero de 2017. La incertidumbre política generada durante los 315 días de Gobierno en funciones, ha dejado el ambicioso plan adormecido en un cajón, hasta que el Consejo de Ministros del pasado viernes lo aprobó, y ayer fue publicado en el BOE.
La medida supone un cambio radical en la gestión de la contabilidad del IVA por parte de las compañías afectadas, básicamente aquellas que están obligadas a presentar la declaración mensual, las empresas que facturan al año más de seis millones de euros. Todas ellas deberán modificar sus sistemas informáticos para adaptarlo a las nuevas exigencias de Hacienda. En lugar de tener un mes para presentar las facturas, a partir del próximo año dispondrán sólo de cuatro días.
“A las compañías este cambio les supone adaptar todos sus sistemas de registros de facturas, demasiada presión, a muchas les va a costar llegar a tiempo, se suponía que iba a haber un año de prueba”, se quejaba ayer el directivo de una empresa afectada.
Hacienda argumenta en el Real Decreto publicado ayer, que el progreso “sustancial que se ha producido en el uso de nuevas tecnologías para la llevanza de los libros registro” permite transformar el sistema de llevanza de los mismos “en un sistema más moderno que acerque el momento del registro o contabilización de las facturas al de la realización efectiva de la operación económica que subyace a las mismas”. Y asegura que la medida “no solo facilitará la lucha contra el fraude fiscal, sino que supondrá una mejora en la calidad de los datos y en la correcta aplicación de las prácticas contables, así como un ahorro de costes y una mayor eficiencia que redundará en beneficio de todos los agentes económicos”.
El nuevo sistema de contabilización del IVA, a través de la Sede Electrónica de la Agencia Tributaria, entrará en vigor el 1 de julio del próximo año, pero además las empresas deberán enviar la información sobre las facturas del primer semestre de 2017 durante el segundo semestre.
Las compañías afectadas tendrán que remitir electrónicamente toda la información requerida sobre facturas emitidas y expedidas en el plazo de cuatro días, cuando antes era de un mes. Una disposición transitoria publicada ayer en el Real Decreto permitirá que el plazo sea de ocho días para las facturas expedidas y emitidas durante el segundo semestre del próximo año.