Tambores de cambio en la cúpula directiva de Endesa, la filial española del grupo público italiano Enel. El primer ministro transalpino, Matteo Renzi, está demostrando que los aires de cambio con los que llegó al cargo no son humo, son reales.
Dijo que iba a bajar los desorbitados sueldos a los directivos de las empresas públicas y que estaba dispuesto a renovar las carpetovetónicas cúpulas ejecutivas de gigantes como la petrolera Eni, la eléctrica Enel o la siderúrgica Finmeccanica, con sus presidentes y consejeros anclados en sus puestos desde hace lustros.
Y así ha sido. De todos los movimientos anunciados a última hora del lunes, uno de ellos tendrá especial trascendencia en España. Renzi ha relevado a Fulvio Conti, el todopoderoso ejecutivo que durante nueve años dirigió la eléctrica Enel y fue el gran artífice de la compra de la española Endesa de la mano del Gobierno de Zapatero.
El primer ministro italiano ha elegido como sustituto a un hombre de la casa, agresivo como él y buen conocedor del negocio tanto en Italia como en España, los dos principales mercados para Enel. Se trata de Francesco Starace, actual consejero delegado de Enel Green Power (EGP), la filial de energías renovables del grupo.
Conti llevaba nueve años al frente de Enel y fue el artífice de la compra de Endesa de la mano de Acciona y de Zapatero
El nuevo consejero delegado, que será nombrado en la junta de accionistas de mayo, removerá buena parte de la primera línea ejecutiva que tenía Conti. Luigi Ferraris, director financiero, y Ginaluca Comin, director de comunicación, sus dos hombres de más absoluta confianza, serán relevados el próximo mes.
Conti y sus dos lugartenientes abandonarán no sólo Enel sino también el consejo de administración de Endesa. Los tres ocupan el cargo como consejeros dominicales en representación del accionista de control, con un 96% del capital.
Starace prescindirá de los lugartenientes de Conti y buscará a tres hombres de su confianza para colocarlos como consejeros de Endesa en lugar de los tres salientes
Éstos serán sólo los primeros cambios que se avecinan en Endesa, que se producirán una vez que la junta de Enel formalice el relevo en su cúpula. Después, Starace tendrá que decir qué hace con los dos altos directivos que dirigen Endesa. Borja Prado llegó cuando Enel y Acciona tomaron el control de Endesa, como consejero, pero en 2009 fue aupado por la italiana al cargo de presidente.
Andrea Brentan ocupa el cargo de consejero delegado desde 2007, es uno de los ejecutivos más respetados del grupo Enel y llegó a sonar como posible sustituto de Conti. Renovó como consejero ejecutivo en 2012.
Prado, también presidente de Mediobanca en España, renovó como consejero en 2011, así que podría estar en el cargo hasta 2015 si no se imponen cambios directos desde Roma.
Borja Prado, que también dirige la entidad financiera italiana Mediobanca en España, es presidente de Endesa desde 2009 y renovó su cargo de consejero hasta 2015
Sin embargo, hay nerviosismo en Endesa por si Starace decide darle una vuelta a la eléctrica española y su estrategia en España y a nivel internacional. El futuro consejero delegado de Enel es un “ejecutivo duro, agresivo, lleva 14 años en la casa, la conoce muy bien y le gusta apostar fuerte. No es amigo de continuismos”, señala una fuente que le conoce de primera mano.
Starace, además, ha sufrido en sus propias carnes, como máximo ejecutivo de EGP, los drásticos ajustes aplicados por el Gobierno español a las energías renovables, ante los que ni Prado ni Brentan han podido hacer nada. Él asumió en su empresa todos los activos verdes de Endesa antes de la salida a Bolsa de EGP, unos activos vapuleados por los sucesivos ajustes aplicados por el Ejecutivo de Rajoy.
Brentan lleva siete años como consejero delegado de Endesa y es un profesional muy respetado en España e Italia, hasta el punto de que sonó como posible relevo de Conti en Enel.
Habrá que ver si Starace opta por imponer una estrategia más agresiva en Endesa frente al Gobierno español y da un vuelco a los planes de la compañía, algo que con los actuales ejecutivos se antoja imposible.
Endesa es, de lejos, la principal filial internacional de Enel y es un activo muy valioso, máxime en un momento en el que el grupo estatal está aplicando un duro plan de eficiencia para reducir su altísimo endeudamiento.
La presidenta de Enel será Patrizia Greco, que procede de Olivetti. En la petrolera Eni, Renzi ha colocado a Claudio de Scalzi como consejero delegado.