Empresas

Abu Dabi ningunea a Soria y eleva al Rey su enfado por la política antirrenovable del Gobierno

El jeque Mohamed bin Zayed al Nayán, Príncipe heredero de Abu Dabi, se quejará al Rey Juan Carlos de los sucesivos hachazos aplicados por el Gobierno al sector renovable y por la falta de diálogo del ministro de Industria con los inversores internacionales afectados. Los dos mandatarios inauguraron en 2011 la planta Gemasolar en Sevilla, impulsada por el fondo soberano y el grupo vasco Sener. Los recortes provocaron que el Emirato demandara en febrero al Gobierno ante el Tribunal Arbitral CIAIDI.

  • El Rey, junto al príncipe heredero de Abu Dabi, el jeque Mohamed bin Zayed al Nahyan. Detrás, el ministro Soria.

La visita oficial iniciada en la tarde noche del domingo por el Rey a Abu Dabi es considerada estratégica por ambos países. Hay tanto en juego en contratos multimillonarios para empresas españolas en el emirato, así como oportunidades de inversión en España para sus poderosos fondos, que nada puede fallar en los encuentros que durante dos días celebrarán ministros y empresarios de los dos países.

Pero un pequeño contratiempo puede enturbiar la visita oficial. El Gobierno emiratí volverá a trasladar a la representación española su malestar por los sucesivos recortes aplicados por el Gobierno a las energías renovables, que afectan directamente a su fondo soberano. Pero esta vez no lo hará ante el responsable directo de esos recortes, el ministro de Industria y Energía, José Manuel Soria, sino ante el propio monarca español.

Tanto el príncipe heredero, el jeque Mohamed bin Zayed al Nayán, como su mano derecha, el sultán Ahmed Al Jaber, ministro de Estado, trasladarán directamente al Rey Juan Carlos su preocupación por los recortes aplicados en los dos últimos años al sector renovable y, especialmente, por el que está en marcha: la Orden Ministerial de parámetros de retribución a las energías verdes, que en breve aprobará Industria sin tener en cuenta las alegaciones de las empresas afectadas y que supondrá un recorte en los ingresos totales (renovables, cogeneración y residuos) de 1.700 millones de euros cada año.

¿Será capaz el Príncipe heredero emiratí de convencer al Rey para que intervenga y el Gobierno suavice el nuevo recorte, que se aprobará en breve?, se pregunta el sector renovable

Entre estas empresas está la compañía estatal de Abu Dabi, Masdar, que en asociación con la vasca Sener en la firma Torresol cuenta con la planta de energía termosolar Gemasolar, en Fuentes de Andalucía (Sevilla).

Abu Dabi decidió en febrero pasado llevar al Reino de España ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI). Contrató al despacho especializado Allen & Overy para presentar una demanda de arbitraje contra la decisión de Industria de recortar las primas a las energías renovables, por introducir nuevos impuestos a la producción eléctrica (7% desde enero de 2013), por eliminar la subvención a la parte generada por gas y cambiar la actualización del IPC.

El fondo soberano Mubadala Development Company, propietario de Masdar y la embajada de Abu Dabi en España intentaron sin éxito convencer a Industria para que suavizara los recortes de 2013.

La vía diplomática hasta ahora sólo le ha servido a EEUU. Ni Alemania ni Japón ni Qatar ni Abu Dabi han conseguido desde sus legaciones en Madrid mover un ápice a Soria de su posición antirrenovable

Pero no sólo no se suavizaron, sino que ahora, mientras el Rey visita Abu Dabi, el Ministerio que dirige Soria está ultimando el texto definitivo de la Orden Ministerial que asestará otro nuevo hachazo, que en el caso del sector termosolar ascenderá a 186 millones.

Abu Dabi, al igual que la mayoría de los inversores internacionales presentes en las energías renovables en España, se han quejado de la cerrazón de Soria y todo su equipo al frente del Ministerio y de su actitud refractaria ante las propuestas de las empresas afectadas. Una de las críticas más extendidas es la falta de diálogo con el sector, que sólo ha podido trasladar sus alegaciones por escrito a la CNMC sin que éstas haya servido para nada, critican fuentes energéticas.

El príncipe heredero emiratí, que inauguró la planta de la discordia con el Rey en octubre de 2011, aprovechará su buena relación con el monarca para trasladarle su malestar, ninguneando así a Soria, que asiste al viaje para vender la marca España, como también harán los ministros García Margallo y Ana Pastor. Una marca España, señalan fuentes conocedoras del viaje, que en lo que respecta a las energías renovables está completamente desautorizada a nivel internacional. El Gobierno de Abu Dabi tiene reservado al ministro canario una visita hooy martes a la mayor planta solar del país, a la que irá acompañado de su máximo responsable.

Margallo y Pastor tratarán de vender la Marca España en el emirato, una enseña desprestigiada a nivel internacional por los recortes retroactivos aplicados por Industria a las renovables

También hablará con el Rey el sultán Al Jaber, que además de ministro de Estado es presidente de Masdar, la empresa afectada por el recorte renovable.

Masdar gestiona con Sener, en total, tres centrales termosolares en Sevilla y Cádiz, en las que han invertido un total de 1.000 millones de euros. Por la de Sevilla, Gemasolar, presentó el arbitraje internacional al tener su sede en Holanda, no en España.

“Confío en que la visita del Rey contribuya a reforzar nuestras relaciones en beneficio de nuestros países y nuestras empresas”, ha dicho Al Jaber ante el Rey.

Fuentes diplomáticas españolas dijeron a Efe que “buscaremos una salida lo más airosa para todos” en el conflicto sobre las renovables. 

Queda por saber si las gestiones de Abu Dabi con el Rey servirán para suavizar la Orden Ministerial en ciernes, algo que no han conseguido en Madrid las legaciones diplomáticas de los países con empresas o inversores pillados en las renovables españolas, con excepción de EEUU.

Ni Japón ni Alemania ni Qatar ni la propia Abu Dabi, entre otros, han conseguido frenar los ajustes renovables, pese al duro enfrentamiento que ha provocado con grandes fondos e inversores internacionales, al coste que ello ha tenido para la Marca España y a la avalancha de demandas y arbitrajes que se avecina por los recortes, muchos de ellos considerados retroactivos por los demandantes.

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación Vozpópuli