La ‘operación Chamartín’ figura entre las prioridades del nuevo ministro de Fomento, Íñigo de la Serna. No es de extrañar, toda vez que el contrato con Distrito Castellana Norte (DCN), la promotora del desarrollo de la zona norte de Madrid, para la cesión de los terrenos pertenecientes a Renfe y Adif, contempla su salida el próximo 31 de diciembre si para entonces, como va a suceder, no está aprobado el plan urbanístico que hace posible la operación. Restan apenas 40 días y Fomento, que hace tiempo que trabaja en esta cuestión, ya ultima la fórmula que propondrá para prolongar el acuerdo.
De la Serna apoyó explícitamente el proyecto de DCN, participada mayoritariamente por BBVA, durante su intervención en el programa La Mañana, de la Cadena Cope. El titular de Fomento aseguró que “es difícil encontrar operaciones que estén respaldadas, desde un punto de vista solvente, por socios que puedan moverse en esas cantidades”, refiriéndose a los 6.000 millones de inversión comprometidos para el proyecto y que podrían esfumarse en poco más de cinco semanas.
Eso es, precisamente, lo que pretende evitar y para eso la operación Chamartín estaba señalada en rojo por su antecesor en el cargo, Rafael Catalá, en los documentos del traspaso de poderes. Como adelantó Vozopópuli, las partes llevan tiempo trabajando en prolongar el contrato, toda vez que ambas quieren seguir intentando sacar adelante el proyecto para transformar el norte de Madrid, que lleva camino de cumplir 25 años desde su planteamiento original.
Sin embargo, queda determinar la fórmula que se empleará para llevar a cabo esta prórroga, especialmente si vuelve a establecerse un horizonte temporal, dado que la legislatura que acaba de arrancar no tiene precisamente garantizada llegar hasta el final. De esta forma, una posibilidad es vincular el traspaso de los terrenos a la consecución de hitos urbanísticos.
Reuniones con las partes
Esta cuestión debe quedar resuelta preferentemente antes de que De la Serna se siente con los principales responsables de DCN. Porque antes se verá las caras con la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, dado que ha sido el Ayuntamiento de la capital el que dirigido el proyecto una vez más a una vía muerta tras denegar la aprobación de la modificación urbanística que lo hacía posible.
Carmena solicitó un encuentro con De la Serna pero en él no pretende hablarle del proyecto de DCN, al que considera enterrado, sino del diseñado como alternativa por el propio Consistorio, denominado ‘Madrid, Puerta Norte’. Y también de la necesidad urgente de adecuar cuanto antes los accesos al estadio de la Peineta, toda vez que está previsto que el próximo verano sea ya el recinto donde dispute sus partidos el Club Atlético de Madrid y algunas de las actuaciones depende de Fomento.
De la Serna tratará en este encuentro de convencer a Carmena de la necesidad de volver a poner sobre la mesa el proyecto de DCN, que asegura ingresos superiores a 1.200 millones de euros para las arcas públicas y permite las actuaciones sin coste para los ciudadanos, al contrario de lo que sucede con la operación propuesta por el Ayuntamiento. Independientemente de la respuesta de Carmena, Fomento trabajará con DCN para la prórroga del contrato.
