Red Eléctrica de España obtuvo un beneficio neto de 358,2 millones de euros en el primer semestre del año, lo que representa un aumento del 8% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, según ha recogido Europa Press.
La empresa presidida por Beatriz Corredor destacó que la evolución de este resultado, en línea con las previsiones, se debe principalmente a la mayor contribución tanto del negocio internacional, como del negocio satelital y de fibra óptica y a la mejora del resultado financiero.
Los ingresos del grupo entre enero y junio ascendieron a 991,4 millones e incluyen la cifra de negocio y los ingresos por participaciones, y son un 0,6% superiores a los registrados en el mismo periodo del año anterior. Estos estuvieron marcados por el crecimiento de los negocios de telecomunicaciones e internacional, que compensan la caída motivada principalmente por la aplicación en este ejercicio de los nuevos parámetros retributivos para la actividad de transporte de electricidad en España de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que establece que la tasa de retribución financiera pase del 6% en 2020 al 5,58% hasta el 2025.
En relación al negocio eléctrico internacional, incrementó su actividad en 4,9 millones, por la incorporación del semestre completo de la sociedad participada brasileña Argo, que en 2020 solo intervino en los resultados del segundo trimestre. En el negocio satelital, se registró un incremento de 5,4 millones en este periodo, originado principalmente por la adquisición por Hispasat de la gestión y transporte de señales de Media Networks Latinoamérica. Contribuyen asimismo a este incremento un mayor crecimiento orgánico y una mayor aportación de Hisdesat. Mientras, la actividad de fibra óptica cierra el primer semestre ligeramente por encima respecto al mismo periodo del ejercicio precedente.
Por su parte, el resultado bruto de explotación, ebitda, del grupo se situó a cierre de junio en los 771,3 millones, un 0,7% superior al obtenido en el mismo periodo del ejercicio anterior. Mientras, el resultado neto de explotación, ebit, se sitúa en los 527,5 millones, un 3,6% superior. Este incremento se explica por el mayor ebitda y por menores amortizaciones del negocio satelital, principalmente.
Inversiones
Respecto a las inversiones del operador de la red eléctrica, estas ascendieron a 252,8 millones, un 31% más que de enero a junio del 2020, una vez descontado el efecto de la adquisición del 50% de la brasileña Argo. De la partida destinada a la gestión y operación de infraestructuras eléctricas nacionales, que ascendió a 183 millones, la mayor parte, unos 172 millones, se destinaron al desarrollo de la red de transporte nacional, lo que ha supuesto un incremento del 32%, y 11 millones a operación del sistema y almacenamiento en Canarias. Por su parte, 15,1 millones tuvieron por destino la actividad de transporte internacional, 43,9 millones el negocio satelital, 2,5 millones el negocio de telecomunicaciones y los restantes 8,3 millones al resto de actividades desarrolladas por el grupo.
Deuda y dividendo
En lo que se refiere a la deuda financiera neta de la compañía, a 30 de junio se situaba en los 5.770,9 millones, un 5,6% inferior a los 6.113,3 millones de finales de 2020. La totalidad de esta había sido contratada a largo plazo y atendiendo al tipo de interés, un 85% es a tipo fijo, mientras que el 15% restante es a tipo variable. A 30 de junio, Red Eléctrica contaba con una liquidez de 3.099 millones.
En lo relativo al dividendo, la empresa aprobó en su junta general de accionistas el pago de 1 euro por acción para este ejercicio, en línea con lo establecido en su plan estratégico. Los dividendos abonados al cierre del primer semestre ascendieron a 147 millones, correspondientes al abono del dividendo a cuenta correspondiente al ejercicio 2020 y que asciende a 0,2727 euros por acción. Además, el pasado 2 de julio repartió 0,7273 euros brutos por acción en concepto de dividendo complementario.
