Luis de Guindos lo tiene claro: no hay que buscar responsables de la crisis de Banco Popular en el BCE, el Gobierno, el fondo de rescate o la CNMV. Sin nombrarle, el ministro de Economía deja caer que el principal responsable es quien hace 15 años hizo que Banco Popular dejara de ser "ejemplar". Hace 15 años, en 2002, fue cuando un joven Ángel Ron fue nombrado consejero delegado.
"Que algo ha fallado está claro. Pero igual habría que mirar más en la propia entidad, no en el Gobierno, ni el Banco de España, ni la CNMV, que no determinan las decisiones que toma una entidad a lo largo del tiempo. Banco Popular hace 15 años era ejemplar. yo tengo mis planteamientos de lo que se ha hecho bien y se ha hecho mal, pero tengo mi idea de mirar hacia delante para no ser una estatua de sal. Independientemente de los errores que nos han traído hasta aquí, se ha minimizado el coste", expuso este lunes el ministro en su comparecencia en el Congreso de los Diputados para explicar la crisis del Popular.
Ron no fue el único destinatario de los recados de Guindos. El último presidente de la entidad, Emilio Saracho, fue también objeto de críticas. En concreto, el ministro insistió en dos ocasiones en el hecho de que Saracho hiciera en su primera intervención pública mención a la falta de capital del banco, "sin un plan concreto". Así, fuentes financieras consultadas por este medio explican que Economía ha estado en los últimos meses "sin palabras" ante decisiones del banquero de inversión.
También el auditor, PwC, fue objeto de críticas por parte del ministro, al desvelar (algo que no era necesario en esta fase) que el Icac le está solicitando información por su labor en Banco Popular.
Defensa a Albella (CNMV)
Frente a esta postura, Guindos defendió en varias ocasiones al supervisor de los mercados, la CNMV, tras la polémica generada por la prohibición de las posiciones bajistas contra Liberbank, algo que reclamaron sin éxito los inversores del Popular. "Lo han explicado muy bien, eran situaciones diferentes", apuntó.
No sólo ha protegido al actual presidente de la CNMV, Sebastián Albella, también a su predecesora, Elvira Rodríguez, responsable del supervisor cuando Banco Popular amplió capital en 2.500 millones en junio del año pasado con dinero procedente de sus pequeños inversores. Según Guindos, "el folleto de esta operación recogía todos los riesgos" y también hay inversores perjudicados por una emisión de 2011 (con Julio Segura de presidente) en deuda subordinada.
Uno de los pequeños errores administrativos que sugirió el ministro es la inexistencia de un plan de emergencia de liquidez para casos como estos a nivel europeo, algo que planteará en la próxima reunión del Eurogrupo. Es decir, que cuando una entidad vuelva a tener la fuga de depósitos de Banco Popular no quiebre, sino que la Junta Única de Resolución (SRB, por sus siglas en inglés) no le lleve a resolución, sino que le dé liquidez transitoria.
Desde bufetes que están trabajando en reclamaciones por Popular señalan que estas medidas extra de liquidez, unidas a una prohibición de las posiciones bajistas, "hubieran evitado que 400.000 inversores perdieran su dinero".
Guindos también ha sugerido que los responsables de los últimos test de estrés (EBA y BCE) "estarán haciendo un análisis" de si se hizo algo mal en los últimos ejercicios.
