Los distintos departamentos de Heineken fueron puestos en alerta el pasado viernes ante un bulo que comenzó a correr como la pólvora a través de WhatsApp donde se mostraba una situación antihigiénica relacionada con palomas y se aseguraba que las imágenes provenían de la fábrica sevillana del grupo Heineken-Cruzcampo. En el mensaje se decía que "el empleado que filmó el video fue despedido después de hacer la denuncia en el Ministerio de Salud (sic.)".
Este es el video en cuestión. El origen del mismo parece estar en Rusia ya que se dio a conocer en octubre de 2016.
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A pesar de la aparente poca credibilidad del mensaje, la compañía tuvo que reaccionar rápidamente ante un tema de gran sensibilidad como es la seguridad alimentaria y respondió con el siguiente comunicado: "En relación a un vídeo difundido con imágenes de palomas en descargas de grano, queremos confirmar que dichas imágenes no pertenecen en ningún caso a ninguna de las instalaciones de HEINEKEN España. Desde la compañía garantizamos que todas nuestras instalaciones, incluyendo la descarga de todas nuestras materias primas, son seguras, están protegidas contra cualquier contaminación externa y cumplen con los más altos estándares de higiene, calidad e integridad del producto".
Desde la compañía, sin embargo, no se ha querido confirmar a este diario si se denunciaría al autor del bulo, un claro intento de desprestigio y de hacer daño a la marca aprovechando el anonimato de internet. Al provenir de WhatsApp, no de una red social más trazable como Twitter, encontrar el origen del mismo se complica, si bien su alcance es igualmente masivo. Muchas empresas son víctimas recurrentes de los 'hoax' por internet y las compañías que trabajan de cara al consumidor son unas de las víctimas preferidas (Danone, Coca-Cola o Mercadona, por poner sólo unos ejemplos). En ocasiones, la propia Policía Nacional ha tenido que intervenir ante oleadas de desprestigio que ya venían de años anteriores. Por ejemplo, en el caso del bulo de las cremas retiradas de Mercadona, que volvió a estar en auge a principios de año tras aparecer por primera vez en 2012, y que movilizó entonces al Ministerio de Sanidad.
Rompe con Tesco por el brexit
El conglomerado cervecero holandés ha sido noticia durante la semana por un problema muy real: la ruptura de relaciones con Tesco, el primer distribuidor alimentario británico, a causa del brexit. Heineken planteó a Tesco una subida de precios que los supermercados rechazaron acometer. La compañía argumentó que la producción se le había encarecido por el aumento de costes tanto en el producto como en el embotellado, siguiendo el camino de Unilever que ya planteó en otoño pasado subidas de precios finales como consecuencia de un aumento de costes.
Sin embargo, al no llegar a un acuerdo Tesco ha quitado de las estanterías 8 marcas del grupo Heineken, mientras que en total 24 de sus 53 enseñas las que se ven afectadas. Serán Tiger, Amstel, Sol, Kingfisher, Birra Moretti, Blind Pig Cider, Fosters Gold y Fosters Radler. También dejará Tesco de tener en sus lineales paquetes de 16 cervezas de marcas como Heineken, Fosters, Strongbow, Kronenbour 1664 y Newcastle Brown Ale.
