A comienzos del presente año, Juan Abelló, hasta ese momento vicepresidente de Sacyr y de Repsol, sorprendía a los mercados al deshacer su posición en el grupo constructor y de concesiones, del que controlaba cerca de un 10%. La operación hizo que el financiero se anotara minusvalías del entorno de los 200 millones de euros. Tan sólo unos meses después, las consecuencias se plasman en el buque insignia inversor de Abelló: Torreal, que afrontará una histórica ampliación de capital de 80 millones de euros.
Sacyr no fue la única desinversión precipitada de Abelló en los últimos tiempos. También salió de Bolsas y Mercados Españoles (BME), el rector de las plataformas bursátiles y de mercados que operan en el país, en el que estuvo cerca de tener una posición considerada como relevante. Por el camino quedó una apuesta por el sector de la alimentación, a través de Ebro Foods, que tuvo que abortar de forma precipitada.
Por todo ello, Abelló necesita tapar agujeros y se ha lanzado en busca de 80 millones de euros para taparlos. La ampliación de capital quedará aprobada en la junta de accionistas que Torreal celebrará a finales del próximo mes de junio, una de las más importantes de su historia.
Torreal está participada al 100% por la familia Abelló y en su práctica totalidad por Juan Abelló que, en principio, tratará de afrontar la operación en solitario. No obstante, fuentes del mercado señalan que dada la cuantía de la operación no es descartable que el financiero buscara apoyos externos.
En 2006 ya llevó a cabo un giro aperturista al dar entrada en el consejo de administración de la sociedad a personas que no eran de la familia ni del círculo de confianza más cercano, como fue el caso del ex portavoz del Gobierno Pío Cabanillas y el presidente de Analistas Financieros Internacionales (AFI), Emilio Ontiveros.
Las pérdidas del capital riesgo
Otro de los problemas que debe afrontar Torreal es el de las pérdidas de su filial de capital riesgos. El brazo de la sociedad en esta área ha registrado pérdidas cercanas a los 70 millones de euros en el último ejercicio. La principal causa reside en la participación que desde hace siete años poseía en Imagina, uno de los accionistas de referencia de La Sexta.
Como muchas de las que ha llevado cabo en los últimos tiempos, la inversión en Imagina no fue ni de lejos como se esperaba, hasta el punto de que Abelló se ha visto obligado a deteriorar el valor de su participación en el accionista de La Sexta ya que la inversión recuperable se encontraba por debajo del valor en libros.
El deterioro en cuestión se fue hasta los 96,5 millones de euros, una cifra que lastró de forma evidente las cuentas de la sociedad de capital riesgo de Torreal, que el año anterior había registrado beneficios superiores a los 34 millones de euros.
Abelló, ya fuera de los consejos de Sacyr y Repsol, cuenta con participaciones en fondos de inversión como principal elemento de su cartera. En un momento delicado desde el punto de vista financiero, busca fondos para iniciar una nueva etapa en Torreal.