Más de 42 bloques completos de viviendas "recuperados" y más de 3.000 viviendas pertenecientes a los bancos ocupadas por personas sin hogar. Este es el saldo de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), que cumple esta semana siete años de existencia. La organización, surgida a raíz del estallido de la burbuja inmobiliaria y el imparable aumento del paro durante los primeros años de la crisis, se centró en combatir y visibilizar el problema de los desahucios en España.
La PAH habla de un mínimo de 3.000 viviendas realojadas en pisos de bancos, pero dicen que son muchas más ya que el acopio de datos es irregular
Esta misma semana, la PAH de Urgell anunció la "recuperación" de un nuevo bloque de pisos situados en dicha localidad leridana, pertenecientes a la Sareb. En total, y según datos aportados por la propia Plataforma, hay actualmente al menos una veintena de edificios del conocido como Banco Malo ocupados por familias mediante el apoyo de la PAH.
Es sólo el último ejemplo de una actividad constante de ocupación ("recuperación" en el argot de los activisitas antidesahucios) por parte de la PAH. Y es que las cifras mínimas hablan de más de 3.000 familias realojadas, pero la propia plataforma reconoce que la información es demasiado granular y poco sistemática, por lo que la cifra en realidad es mucho mayor. "Solo en Terrasa, por ejemplo, la PAH ha recuperado al menos 56 viviendas. El recuento de todas las personas es imposible, porque algunas delegaciones sí que actualizan sus datos, pero otras no lo comunican", reconoce Bernat Sorinas, responsable de Obra Social en la organización.
Más desahucios de alquileres y okupas
Según datos del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) cada día se producen en Cataluña 10 ocupaciones de viviendas, un 118% más que en 2010. En España en su conjunto son muchas más. Este incremento en la ocupación ha provocado a su vez que los desahucios precisamente de okupas también se haya disparado. Aunque aún siguen siendo minoritarios frente a los lanzamientos provocados por los impagos en el alquiler (el 52,6%) y los impagos en las cuotas hipotecarias (43,3%).
"Los bloques son más difíciles de desalojar, tanto física como simbólicamente"
El problema para reflejar esta realidad es, según explica Bernat Sorinas, que la estadística actual no cubre los casos de los okupas. "La estadística no habla de ellos como de desahucios, sino como desalojos. Así, miles de familias están quedando fuera de las estadísticas oficiales", señala. Tal y como explica, los desahucios, lejos de disminuir, están viviendo una auténtica ofensiva en los últimos meses. "Estamos ahora parando más desalojos que nunca", asegura.
Una de las formas de evitar precisamente que las autoridades puedan cumplir la actual normativa y llevar a cabo los lanzamientos judiciales es mediante la ocupación de bloques de edificios. "Los bloques son más difíciles de desalojar, tanto física como simbólicamente", explican: la posibilidad de concentrar a cientos de activistas en un mismo sitio por varias causas es más sencillo que convocar a decenas de personas en distintos barrios y ciudades.
Denuncia de una ley abusiva e insuficiente
"Han sido siete años largos e intensos", explica Sorinas. La Obra Social de la PAH es una de las patas sobre las que se asienta un proyecto que ha plantado cara a la banca y a las autoridades, enfrentándose a una normativa de desahucios considerada ahora abusiva y con plazos "insuficientes" por parte de la justicia europea. Una actividad primero centrada en la paralización de los desahucios, pero que a medida que los casos iban incrementándose, se ramificó en distintas vías de activismo, como la recolocación de personas sin hogar o la recogida de firmas para tramitar una ILP en el Congreso.
El último episodio protagonizado por la PAH fue la campaña #laSarebesnuestra, mediante la que localizaron más de 22.000 de viviendas controladas por el llamado banco malo y en la que facilitaban a las distintas delegaciones de la plataforma las herramientas para llevar a cabo ocupaciones con garantías legales. A pesar de que la Sareb amenazó con emprender acciones legales por la creación de la web, desde la PAH aseguran no haber recibido ninguna reacción oficial.