Los afectados por la crisis de Banco Popular preparan su artillería para la guerra judicial. Apenas seis meses después del rescate exprés a costa de los accionistas y bonistas, ya hay informes periciales que apuntan a posibles irregularidades. En el primero, al que ha tenido acceso Vozpópuli, cinco economistas avalan un posible enriquecimiento ilícito en la venta de la entidad a Santander.
"Los ajustes realizados tras la venta a Santander de 12.217 millones de euros se adaptan como un guante al tamaño de la reserva indisponible lo que permite justificar, nuevamente, el precio pagado por el Banco Santander y las amortizaciones realizadas a accionistas y tenedores de deuda subordinada", expone el informe.
Firman este documento de 170 páginas los economistas Gracia Rubio Martín, Ángel García Martínez, Yolanda de la Morena, José María Jerez y Miguel Pérez Somalo. Este trabajo ha sido encargado por el bufete Jausas, que está preparando una demanda de más de 100 millones contra Santander.
La principal tesis del informe es que Popular era más solvente de lo que se ha dejado ver en los últimos meses, y que se podrían haber alcanzado soluciones distintas sin necesidad de que asumieran pérdidas los accionistas y, mucho menos, los bonistas. Para sostener esta postura, el informe pericial aborda las distintas partidas que han sido provisionadas por Santander tras la compra.
Factores del informe
La primera, la morosidad: los economistas creen que las "provisiones [de 7.200 millones de Santander en el balance inmobiliario del Popular] parecen excesivas, y muy conservadoras". En este sentido, los expertos no ven justificado que la morosidad de Popular creciera al 21% tras la compra del Santander.
Gracias a estas provisiones, Popular-Santander pudieron vender el 51% del ladrillo a Blackstone. "El exceso de cobertura de los activos permitía a Santander justificar los ajustes realizados", añaden los peritos.
Los expertos también critican que Santander incluya en el saneamiento de Popular el dinero usado (670 millones del bono fidelización) para compensar a los perjudicados: "Se pretende compensar a ciertos clientes con su propio dinero".
El informe señala otros tres factores del posible valor oculto en Popular: los 2.036 millones en créditos fiscales monetizables; la potencial puesta en valor de intangibles como la informática del Popular; y las plusvalías de 411 millones en la cartera de deuda pública.