Cuatro empleados que son también accionistas de Renault han presentado una denuncia contra el fabricante automovilístico francés por malversación en razón de una serie de operaciones financieras que consideran opacas salidas a la luz con motivo del falso caso de espionaje interno.
La emisora de radio "France Info" reveló este jueves esta demanda, formalizada ante el Tribunal de Gran Instancia de Nanterre, en las afueras de París por los cuatro asalariados-accionistas a los que no identificó con sus nombres, informa Efe.
Con su iniciativa quieren que los dirigentes de la compañía aclaren de dónde procedía el dinero que se utilizó para llevar a cabo la investigación que condujo a Renault a anunciar públicamente a comienzos de enero de 2011 que había sido víctima de una operación de espionaje por tres de sus ejecutivos, que fueron despedidos.
En concreto, les instan a que expliquen por qué se utilizó un sistema de intermediarios y de cuentas en el extranjero para pagar al "informador" que detalló un espionaje que luego se demostró falso, lo que obligó a indemnizar a los ejecutivos despedidos.
De hecho, los denunciantes también plantean diferentes preguntas sobre los varios millones de euros que se tuvieron que abonar en concepto de indemnización.
Igualmente aluden a las recientes acusaciones de un antiguo directivo de Renault en Luxemburgo, que reprocha haber sido expulsado de la empresa de forma injusta, y que declaró ante los servicios secretos de la policía francesa que Renault utilizaba facturas falsas en sus filiales europeas para beneficiarse de exenciones fiscales.
La dirección de Renault señaló por boca de una portavoz no tener por el momento confirmación formal de la denuncia y por eso no quiso avanzar ningún comentario.