Acciona ha decidido dar un giro estratégico a su negocio inmobiliario y las primeras consecuencias no se han hecho esperar. Dos años después de incorporarse a la compañía, procedente de la Sareb, Walter de Luna abandona el grupo controlado por la familia Entrecanales, que ahora potenciará la actividad residencial, en la que focalizará todos sus esfuerzos tras valorar diversas opciones para optimizar uno de sus negocios no estratégicos.
Entre esas opciones, Acciona estuvo valorando la posibilidad de sacar a bolsa un porcentaje de su filial inmobiliaria. También estudió la búsqueda de un socio, industrial o financiero, al que vender una participación en el capital de la filial sin necesidad de ponerla en el parqué, toda vez que el entorno de los mercados no ha sido el más recomendable.
El fichaje de Walter de Luna, que estuvo un año como número 2 de la Sareb, bajo la presidencia de Belén Romana, se enmarcó en la búsqueda de un plan adecuado para el futuro desarrollo de Acciona Inmobiliaria. Sin embargo, el camino que definitivamente ha decidido emprender la compañía no pasa por el perfil financiero que presenta De Luna, según ha podido saber Vozpópuli de fuentes del sector, por lo que definitivamente se ha optado por su marcha.
La hoja de ruta de Acciona Inmobiliaria para el futuro inmediato pasará por potenciar el negocio de promoción residencial. Después de años de escasa actividad en esta área, terriblemente castigada por la crisis, el grupo considera que en los próximos meses se confirmará un cierto giro del mercado hacia el negocio tradicional de la construcción y venta de viviendas.
Esto no significará que Acciona abandone la pata patrimonialista de su negocio inmobiliario. La compañía acelerará la rotación de su cartera de este tipo de activos cuando encuentre buenas oportunidades en el mercado. Los ingresos obtenidos por estas ventas se destinarán, en su mayor parte, a potenciar el negocio de promoción residencial, que se convertirá en la principal actividad de la compañía.
De esta forma, Acciona confeccionará una nueva cúpula para su filial inmobiliaria, muy probablemente a través de la promoción interna, toda vez que cuenta con especialistas en el área del negocio residencial.
Walter de Luna llegó a la compañía acompañado de un pequeño equipo de personas de su perfil, algunas de las cuales habían trabajado con él en Sareb y también le habían acompañado en la consultora Iberian Real Estate Opportunities, que abrió tras abandonar el conocido como ‘banco malo’.