El grupo Royal Caribbean ha decidido reorganizar su estrategia de negocio para Pullmantur, la empresa líder en cruceros en España y que adquirió en 2006 al grupo Marsans en una operación valorada en 700 millones. La compañía se ha anotado en sus últimos resultados trimestrales pérdidas por deterioro de 399 millones de dólares, 363 millones de euros aproximadamente, por reducción del valor de la marca y de buques y aviones de Pullmantur.
La multinacional decidió hace apenas dos años apostar por el mercado latinoamericano e impulsar el negocio de Pullmantur en la región previendo una mejora de su economía. Sin embargo, "la reactivación de la economía de América Latina ha sido corta", explica Royal Caribbean, "las economías de Brasil, México, Argentina, y Venezuela han caído y sus monedas se han depreciado respecto al dólar". Por esta razón, el grupo turístico ha dado marcha atrás a su estrategia de impulsar su presencia en Latinoamérica, centrándose en el mercado español, "y reducir consecuentemente la flota de buques de Pullmantur".
La compañía admite que el valor en libros de dos buques y tres aviones de Pullmantur es superior a su valor razonable
"Nuestra decisión de reducir el tamaño de la flota de Pullmantur disminuye significativamente las proyecciones de flujos de efectivo que han sido la base de nuestro análisis de deterioro", señala Royal Caribbean. "Como resultado de nuestro análisis, determinamos que el valor en libros de Pullmantur excede su valor razonable", añade. El grupo se ha anotado en sus últimos resultados trimestrales un deterioro de 123,8 millones por el fondo de comercio y otro de 174,3 millones de dólares relacionado con el valor de la marca de Pullmantur. Además, Royal Caribbean ha estimado que el valor en libros de dos buques y tres aviones de Pullmantur son superiores al valor razonable, lo que suma otros 113,2 millones de dólares. En total, el deterioro por la reducción del valor de la marca y de los activos resulta una provisión de 411 millones de dólares; a dicha cantidad Royal Caribbean resta 12 millones de dólares por beneficios fiscales.
Las medidas incluyen el traspaso del buque Empress de Pullmantur a Royal Caribbean International, y la cancelación de la cesión del Majesty of the Seas a la filial española, que estaba prevista para 2016. El Empress tiene capacidad para 1.877 pasajeros y una tripulación de 645 personas, y cuenta con varias piscinas, seis restaurantes, diez cubiertas. Fue botado en 1990 y remodelado en 2004. El Majesty of the Seas iba a ser uno de los buques estrella de Pullmantur; tiene capacidad para 2.350 pasajeros, nueve bares, casino con 212 máquinas tragaperras y doce mesas de juego, cancha de baloncesto, pista para correr en cubierta, restaurantes de cocina asiática, mexicana...
En la presentación de los resultados, el presidente de Royal Caribbean, Richard Fain, ha manifestado que el "correcto dimensionamiento de la flota de Pullmantur será la mejor manera de equilibrar la oferta y la demanda en el mercado español" y que los cambios acometidos "deberían poner a Pullmantur en la senda del éxito".
Desde Pullmantur se señaló el lunes a Vozpópuli que pretende "reforzar todavía más nuestra apuesta por los mercados de España y Francia, mercados ambos en los que somos un referente destacado en el sector de los cruceros". Sobre el mercado latinoamericano la empresa indicó que trabaja "en la consolidación de nuestra presencia en la región, ajustando nuestra oferta en consonancia con la realidad del continente centrándonos todavía más en los momentos de mayor demanda". Sonia Prieto, directora general de Pullmantur Cruceros en España y Portugal, destacó que la empresa está "constantemente trabajando en la optimización de nuestros recursos con el fin de mejorar nuestra propuesta a los miles de pasajeros que cada temporada confían en nosotros y nos convierte en su naviera preferida”, y subrayó la llegada del buque Monarch, con capacidad para cerca de 1.000 pasajeros, para la próxima temporada de verano.