Cerca del 35% de los antiguos pequeños accionistas de Banco Popular que acudieron a la ampliación de capital de 2016 de la entidad intervenida el pasado 7 de junio, susceptibles de aceptar la oferta lanzada por Santander el mes pasado, ha firmado el acuerdo ofrecido por el primer banco español.
La entidad presidida por Ana Botín se ha propuesto captar hasta el próximo día 7 de diciembre 980 millones de 115.000 inversores. Santander comenzó el 13 de septiembre a ofrecer a los minoristas que fueron a la ampliación de Popular de 2.500 millones de euros realizada en junio de 2016 los denominados bonos de fidelización. La entrega de dichos bonos está fechada para el próximo 15 de diciembre, estando previsto que el primer pago de la remuneración se efectuará el 15 de marzo del próximo año.
De acuerdo a dos fuentes conocedoras del proceso de captación iniciado el mes pasado por Santander, hasta este lunes, el porcentaje de clientes potenciales de firmar la oferta del bono de fidelización que efectivamente lo habían hecho no alcanzaba el 35%. Las fuentes explican que el banco está empleando un programa informático que va actualizando el número de firmas de contratos, por lo que el porcentaje es un dato preciso.
"El proceso es más tedioso de lo que pueda parecer, se puede tardar desde dos días hasta dos semanas"
Santander, con el que contactó ayer miércoles este diario, se remitió a las declaraciones realizadas por el consejero delegado del grupo en España, Rami Aboukhair, del pasado 27 de septiembre, en un foro organizado por KPMG y el diario Expansión. Entonces el ejecutivo de Santander aseguró que esa misma semana se había cubierto el 50% del importe (980 millones) que se pretendía alcanzar con el bono de fidelización. Pero en sus declaraciones Aboukhair, que el mes pasado fue nombrado también consejero delegado de Banco Popular, no se refirió al porcentaje del número de clientes.
Las fuentes consultadas señalan que el proceso, especialmente en una primera etapa, es más tedioso de lo que pueda parecer en un principio, y apuntan que aunque el 35% parezca un porcentaje pequeño, las previsiones de acuerdo a la proyección que ha habido hasta ahora de solicitud de información y firma de los contratos, apuntan a que entre un 70% y un 80% del total de los clientes aceptarán la oferta de Santander.
En términos generales, los que opten por vender los bonos ofrecidos en el mercado secundario podrán recuperar a partir de mediados de diciembre aproximadamente el 70% de su inversión (según el folleto de Santander publicado en CNMV). Los clientes que se acojan a la oferta de Santander, en lugar de vender los bonos en el mercado secundario, también pueden esperar siete años a que sean amortizados; los bonos ofrecen un interés del 1% hasta el 15 de diciembre de 2024.
Los inversores que acepten la oferta de Santander tienen que comprometerse a no emprender acciones legales
Santander ha dado máxima prioridad a esta campaña de captación de antiguos accionistas del Popular. El grupo ha espoleado a sus comerciales para alcanzar los objetivos previstos. Rami Aboukhair envió un mensaje motivador a la red del Popular poco antes de que se pusiera en marcha la oferta: "A partir del 13 de septiembre comenzaremos a comercializar el bono de fidelización. Poca gente esperaba que grupo Santander diera un paso tan valiente, por el cual el 99% de los inversores minoristas que invirtieron en acciones de Banco Popular [...] recuperará sin desembolso el total de su inversión".
También los directivos de las oficinas comerciales bancarias han trasladado a sus equipos la importancia de la campaña. "El comportamiento de las sucursales está siendo dispar, esto es para listos y hay gente que lo está haciendo mejor que otros", advirtió el director de una oficina a sus empleados, en un audio al que ha accedido este diario. "Hoy tiene que ser un gran día, hoy empezarán los rankings, las mediciones, las estadísticas, y empezará a verse como se posiciona cada uno. El que va delante es el que alumbra", animó.
Deloitte chequea
Santander ha contratado a Deloitte en el proceso de captación de accionistas de Banco Popular que acudieron a la ampliación del banco de 2016 y a los que ha ofrecido la posibilidad de contratar un bono de la entidad a cambio de las antiguas acciones del banco intervenido, siempre que renuncien a emprender acciones legales para intentar recuperar su inversión.
La función de Deloitte es la de chequear que los accionistas que deciden solicitar información sobre el bono de Santander cumplen con los requisitos, y después enviar a las oficinas bancarias los contratos preparados para ser firmados. Un proceso más tedioso de lo que en principio podría parecer y que puede conllevar varias semanas.
De acuerdo a las fuentes conocedoras del proceso consultadas por este diario, las oficinas bancarias ofrecen a los potenciales clientes un documento informativo que deben firmar y acompañar de su DNI. Este documento es enviado por las oficinas al equipo de Deloitte, que confirma que el potencial cliente cumple los requisitos para aceptar el bono de fidelización ofrecido por Santander. Entonces, la consultora envía los contratos a la oficina bancaria. Y los empleados del banco tienen que volver a contactar con el cliente y acordar la firma del contrato.
"Se puede tardar desde sólo dos días hasta dos semanas", comentan. "Depende mucho de la disponibilidad que tenga el cliente para pasarse un día por la oficina y firmar el acuerdo, por eso el proceso se puede alargar en ocasiones", añaden.