La inversión española pierde peso en Enagás, la empresa propietaria de la red española de gasoductos y responsable de la operación del sistema gasista. Los inversores extranjeros han copado la colocación del 5% de Enagás llevada a cabo esta mañana; según fuentes del mercado, sólo un 9,8% de los compradores del paquete que estaba en manos de Sagane inversiones son españoles y cerca del 76% son anglosajones: el 48,8% procede de Estados Unidos, el 28%, de Reino Unido y el 13,3% restante, de otros países europeos.
Con esta venta, el peso de los grandes accionistas españoles en la empresa que preside Antoni Llardén queda reducido a tres socios, todos ellos con el 5%: la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), Kutxabank y Liberbank. El otro accionista significativo, también con el 5%, es el grupo árabe Omán Oil.
Banco Santander y Credit Suisse han informado esta mañana a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) de la ejecución de una colocación privada acelerada entre inversores cualificados del paquete de Enagás que hasta ahora pertenecía a Sagane, sociedad compuesta por Caja Murcia, Caja Granada (ambas parte de Banco Mare Nostrum) y Caja Castilla La Mancha.
La operación, que fue avanzada anoche por la compañía y se ha cerrado en apenas una hora, ha permitido ingresar a esas cajas 175,4 millones de euros y se ha ejecutado a un precio medio de 14,7 euros por acción. Supone un descuento aproximado del 4,56% respecto al precio medio ponderado de la sesión bursátil de ayer. La colocación ha propiciado que Enagás lidere hoy las caídas en el Ibex 35, al retroceder un 7,75%, hasta 14,51 euros.