Telefónica se está empleando a fondo para recuperar el terreno perdido en España y para ello se ha unido a los dos operadores alternativos de más pujanza, Jazztel y Yoigo. Sus competidores tradicionales, Vodafone y Orange, no tardaron en denunciar el segundo de estos acuerdos y han conseguido que el regulador CNMC abra expediente sancionador por supuestas prácticas competitivas.
Pero en el negocio de las telecomunicaciones se da por descontado que la operadora que preside César Alierta cederá y abrirá el acuerdo con Yoigo al resto de operadores, confirman a Vozpópuli fuentes del sector.
De esta forma evitaría que siga adelante el expediente sancionador incoado en la CNMC por el acuerdo de julio por el que el ex operador dominante le presta su red de banda ancha fija a la filial de TeliaSonera a cambio de que Movistar pueda ofrecer telefonía móvil 4G sobre su infraestructura.
El superregulador presidido por José María Marín Quemada considera que el acuerdo “podría constituir una restricción de la competencia” y Vodafone y Orange, que están desarrollando su propia alianza para compartir el despliegue de fibra óptica, acusan a Telefónica de forjar una fusión encubierta con Yoigo y convertir a su aliado en un mero agente de ventas de su producto estrella, Fusión.
Los dos grandes competidores de Telefónica quieren una oferta mayorista sin límites y poder competir en precios y el ex monopolio les acusa de no querer invertir en banda ancha
Pero lo que realmente quieren los dos grandes competidores de Telefónica es que el antiguo monopolio abra su mercado mayorista al resto de compañías para que éstas puedan ofrecer productos y servicios de hasta 100 megas.
Vodafone y Orange critican que el pacto que ahora analiza la CNMC afecta a los negocios tanto fijo como móvil, mediante la firma de acuerdos en servicios, en la uso de la red y del espectro radioeléctrico.
En esta misma línea se pronuncian otras fuentes del sector de las telecomunicaciones, que consideran que el acuerdo es restrictivo para los competidores y alertan de que la CNMC podría ser dura en su resolución.
Pero desde Telefónica recuerdan que el regulador no ha fijado medidas cautelares tal y como pedían los denunciantes, a los que acusa de no querer invertir en banda ancha, y que lo firmado con Yoigo no excede de un acuerdo normal de roaming. Según las condiciones del acuerdo, Movistar ofrecerá servicios de telefonía móvil avanzada 4G sobre la red de Yoigo y esta última podrá comercializar un paquete convergente que integrará sus servicios móviles y los fijos (voz y banda ancha) de Telefónica.