Unicaja Banco está cada vez más decidida a cotizar en bolsa. Los directivos de la entidad malagueña y sus asesores financieros presentarán en los próximos días una propuesta al consejo de administración del banco para intentar dar el salto al parqué entre diciembre y enero, según fuentes financieras próximas a la operación consultadas por Vozpópuli. La fecha clave es el 30 de septiembre, cuando se reúne el órgano de administración de Unicaja Banco. Desde la entidad señalaron que todavía no hay una decisión tomada y que se están analizando todas las opciones.
El reto es de una magnitud considerable, dada la volatilidad que reina en los mercados en los últimos meses y los descuentos con los que cotizan otras entidades comparables, que en los casos de Popular y Liberbank superan el 50% sobre el valor contable. A pesar de ello, Unicaja Banco y sus asesores ven más pros que contras en cotizar en bolsa, ya que así se cumpliría con las obligaciones fijadas por en la compra de Banco Ceiss; se daría liquidez a los antiguos dueños de deuda subordinada; y se allanaría el camino para ir devolviendo las ayudas públicas al Frob, el fondo estatal encargado de gestionar el rescate a las cajas.
Unicaja ha mantenido conversaciones con Apollo en los últimos meses para la venta de su plataforma inmobiliaria
En este entorno, se abren dos escenarios para la entidad malagueña: que se calmen las aguas en los mercados a finales de año e intentar el salto al parqué de la mano de su asesor financiero, Rothschild, y los cuatro colocadores ya seleccionados (Morgan Stanley, Citigroup, BBVA y UBS); o que la bolsa siga con una alta volatilidad, ante lo que surgirían otras dos opciones. La primera, intentar una pequeña colocación que no golpeara las cuentas de la Fundación Bancaria Unicaja, ahora presidida por Braulio Medel y que tiene un 90,7% del capital; o retrasar sine die la operación, para lo que necesitaría el visto bueno de Bruselas, que le podría exigir nuevas condiciones en el plan de reestructuración.
La salida a bolsa en marcha de Telxius y la paulatina recuperación del Ibex 35 desde el batacazo posterior al Brexit invitan al optimismo a los gestores de Unicaja, para al menos intentar la operación. Junto a ello, hay otro aliciente para probar la vía de la salida a bolsa: el calendario de devolución de ayudas al Frob. Su filial Banco Ceiss recibió 604 millones para la fusión con Unicaja en bonos convertibles contingentes (CoCos), que tiene que devolver en abril de 2017. En caso contrario, Unicaja Banco pasaría también a ser responsable del reembolso de las ayudas.
Plataforma para captar capital
Cotizar en bolsa sería la plataforma más idónea para que Unicaja y Banco Ceiss captaran el capital necesario para devolver las ayudas públicas. Pero la entidad malagueña ha explorado otras opciones durante los últimos meses. Así, fuentes financieras consultadas por este medio señalan que Unicaja Banco ha mantenido conversaciones con Apollo para el posible traspaso de su plataforma inmobiliaria, en una operación similar a las llevadas a cabo por Santander con Altamira, Popular con Aliseda o CaixaBank con Servihabitat.
Sin embargo, esta posibilidad se frustró, entre otros motivos, debido a que el fondo norteamericano se está replanteando su estrategia inmobiliaria en España. Lo hace después de que Santander haya puesto sobre la mesa la posibilidad de recomprar su 85% en Altamira. Las conversaciones entre Unicaja y Apollo se produjeron sin la contratación de ningún asesor, pero al más alto nivel directivo. Desde otros fondos oportunistas presentes en España esperan que esta operación salga en algún momento al mercado.