Endesa seguirá reduciendo el porcentaje de beneficio que destina a remunerar a sus accionistas en 2022. Si en la presentación del plan estratégico que este martes procederá a revisar ya anunció que el pay-out, hasta ahora del 100%, se reduciría a un máximo del 80% a partir de 2021, para el año siguiente la rebaja será aún mayor, hasta el 70%.
Este martes, la italiana Enel, accionista mayoritario de Endesa con una participación del 70%, adelantó que las cifras de inversión de la eléctrica española hasta 2022 ascenderían a 6.300 millones de euros para el total del periodo del plan estratégico, un 14% de lo previsto inicialmente, en el marco de la aceleración que el grupo transalpino llevará a cabo en su política de descarbonización de la producción.
De este modo, a Endesa irá a parar el 22% del total de la inversión de Enel mientras esté vigente el plan, unos dos puntos porcentuales por encima de lo previsto en el diseño presentado en 2018. De manera global, el gigante italiano destinará algo más de la mitad de su inversión en energías renovables, tanto en la sustitución de sus plantas de producción tradicionales como en la puesta en servicio de nuevos megawatios a partir de fuentes renovables.
De esta partida, Enel reserva 5.600 millones de euros para la instalación de 5.400 megawatios renovables para la sustitución de centrales convencionales en Italia, España y Chile. En total, Enel prevé incrementar su potencia renovable instalada en todos los mercados donde opera a un ritmo de 4.700 MW por año, frente a los 3.000 MW por ejercicio que recogía el plan original.
Nuevas previsiones de Enel
Las nuevas previsiones de Enel contemplan un beneficio bruto de explotación de Endesa de 4.200 millones de euros en 2022. Mientras, el grupo italiano prevé alcanzar el final del plan con un beneficio en torno a los 6.100 millones de euros, un 8% por encima de las anteriores estimaciones.
