España conseguirá en 2019 desterrar el 'mantra' que decía que con un crecimiento económico inferior al 2% se destruye empleo en el país, ya que el año cerrará con un crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) del 1,9%, según las previsiones de los analistas, y aún así el empleo crecerá un 2,2%, gracias a la flexibilidad que ha aportado al mercado de trabajo la reforma laboral de Mariano Rajoy del año 2012.
Este cambio de tendencia se perpetuará también en 2020 y de nuevo en 2021, cuando el PIB se ralentizará hasta el 1,5%, según prevé el panel de economistas de Funcas, y aún así la creación de puestos de trabajo subirá un 1,1%, con lo que la tasa de paro quedará cercana al 14%. En 2021, esperan que el PIB suba un 1,8% y que el empleo crezca un 1,6%.
"En anteriores fases de desaceleración, el empleo caía cada vez que el crecimiento se situaba por debajo del 2%. Sin embargo, ese umbral podría haberse reducido significativamente como consecuencia de los cambios estructurales que se han producido en el mercado laboral", explican los expertos en su informe de Proyecciones Macroecónomicas para España 2019-2021 recogido por Vozpópuli.
Esta modificación se debe a "cambios estructurales que se han producido en el mercado laboral" y que han permitido una creciente importancia del trabajo a tiempo parcial, los contratos temporales y lo que denominan "formas atípicas de empleo", como recurrir a falsos autónomos.
También hacen referencia a que las empresas ahora pueden hacer ajustes internos en caso de que lo necesiten, sin tener que recurrir a los recortes de plantilla, como ocurría antes de que entrara en vigor la reforma laboral y como se comprobó en la crisis económica. Ahora las empresas, por ejemplo, pueden optar por reducir el horario de parte de la plantilla en lugar de recurrir a los despidos.
Históricamente, siempre que ha habido épocas de crecimiento económico en España el PIB ha crecido por encima del 2%, como se puede apreciar en el siguiente gráfico, y sólo en el inicio de la recuperación después de la última crisis crecimos a ese ritmo y ahora parece que el crecimiento fluctuará entre el 2 y el 1% en los próximos años.
Subirá la productividad
"El empleo todavía crecería tanto en 2020 como en 2021, aunque menos que la economía, lo cual permitiría un repunte de la productividad -un fenómeno especialmente pronunciado durante las fases de desaceleración en España-", apuntan.
Los economistas prevén que en los próximos años se cree medio millón de puestos de trabajo netos y que la tasa de paro siga reduciéndose hasta el 12,2% a cierre de 2021. El Gobierno es algo más optimista y prevé que esta tasa quede por debajo del 10% en el año 2022.
Funcas parte en su pronóstico de que en el año 2020 se mantiene el escenario actual de prórroga presupuestaria de las cuentas de 2018 de Cristóbal Montoro, al que incorporan algunas medidas ya anunciadas por el presidente en funciones, Pedro Sánchez, como la subida de las pensiones con el IPC, el alza de sueldo de los empleados públicos o la actualización de las entregas a cuenta a las Comunidades Autónomas.
No barajan, por tanto, que Sánchez lleve a cabo retoques en la reforma laboral (tal como ha anunciado), ya que precisamente atribuyen a la flexibilidad que permite este marco laboral el hecho de que se vaya a crear empleo aun con un crecimiento reducido.