El próximo 23 de julio tendrán lugar las elecciones generales. Una fecha no exenta de controversia. Es época estival, asociada a las vacaciones de millones de españoles que esos días no estarán en sus localidades de origen. El voto presencial o por correo ordinario son los dos únicos formatos permitidos en España para ejercer el derecho a sufragio.
Sin embargo, España cuenta con una tecnología que permite votar de forma electrónica desde cualquier lugar del mundo y de una forma sencilla y rápida. Ha sido desarrollada por Indra, la empresa público-privada sobre la cual el Gobierno de Pedro Sánchez tomó el control en junio del año pasado a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), Amber (el fondo dueño de Prisa) y Sapa Placencia.
De hecho, es una herramienta que ya se ha exportado. En concreto, México optó en uno de sus últimos comicios por Indra para la ejecución de los votos electrónicos de los no residentes en el país hispanoamericano. La empresa española resultó adjudicataria del concurso público.
Hay dos modelos de voto electrónico. El primero consiste en la sustitución de las papeletas físicas por otras que son enviadas a través de una máquina a la administración electoral correspondiente. El segundo permite votar desde cualquier ordenador o dispositivo conectado por internet a la administración
Es una opción que podría acabar con los problemas que plantean tanto formaciones políticas como gran parte de los ciudadanos de cara a estas elecciones. Estos últimos temen ser designados para formar parte de las mesas electorales, viendo así interrumpido su descanso. En el caso de que no sean designados, si están de vacaciones fuera de las localidades en las que están censados tendrán que desplazarse en mitad de su periodo de descanso (siempre que quieran votar).
Tipos de voto electrónico
El Parlamento Europeo describe dos modelos diferentes de sufragio electrónico. El primero de ellos no se desliga por completo del formato electoral actual. Básicamente consiste en la sustitución de las papeletas físicas por otras digitales que son enviadas a través de una máquina a la administración electoral correspondiente.
La Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) estrenó en 2010 este sistema de voto en sus elecciones al Claustro
El segundo formato implica votar desde cualquier ordenador o dispositivo conectado por internet a la administración.
La UNED y el voto electrónico
La Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) estrenó en 2010 este sistema de voto en sus elecciones al Claustro.
Fue en 2010 y se trató del primer proceso electoral de este tipo realizado íntegramente de forma electrónica. Todo fue digitalizado, desde el sistema de voto hasta los procesos de escrutinio.
En esos comicios, cerca de 3.000 personas entre profesores y personal de administración y servicios votaron en remoto para elegir a los nuevos integrantes del máximo órgano de representación de la comunidad universitaria.
"El elector accede a la plataforma de voto desarrollada para la ocasión a través de la web de la Universidad y procede a la selección de su opción, previa identificación mediante su tarjeta inteligente de la UNED, DNI electrónico o con sus claves secretas, habilitadas y entregadas específicamente para estas elecciones. A partir de ahí, los votos se transmiten cifrados y de forma automática a la plataforma de voto electrónico de la compañía de TI, ubicada en uno de los múltiples Centros de Servicio que Indra tiene en España", explican desde la empresa.
